ADVERTENCIA: puede haber vocabulario fuerte y escenas de violencia, no pretendo ofender ninguna clase de religión ya que esto es solo fantasia.
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Albany, Oregón
bueno, que quieren que les diga, día domingo, lluvia la mayoría del día, igual que la mayoría de los meses del año, la lluvia se filtraba entre las hojas de las copas de los árboles, los que los hacía ver aún más brillantes cuando se dejaba asomar unos rayos del sol.
-Sam, ¿porque no me acompañas a comprar?.
veo hacia la puerta de mi habitación que esta media abierta, y ahí mi papá, bueno no es mi papa verdadero, pero lo quiero como si fuera el biológico, es alto de piel media bronceada, pelo medio rubio, entiendo porque mi mama se enamoro de él.
es un buen tipo, aprendí a quererlo como si fuera mi verdadero padre, aparte de guapo, todas las tipas de su edad están locas por él, pero mi mamá ya lo tiene marcado como si fuera un objeto, pero se que se quieren mucho.
-¿no me puedo quedar en mi camita calentita leyendo?- ya se, debería salir mas, pero quien se niega a una tarde de lluvia estando en casa- bueno...creo que te perderás de ese chocolate que te iba a comprar si me acompañabas..
mientras terminaba de decir esa frase él se iba dando la vuelta lentamente, ese hombre sabe como sacar a una adolescente de la cama, no me puedo negar a un chocolate gratis- nonononon esperaaaa-
era obvio que esto iba a pasar, terminar en el suelo a veces es como un don que tengo, estar en este momento en el suelo no fue mi culpa, fue de las sabanas, siempre se enredan en las piernas.¿no les pasa que durante la noche sacan todas las sabanas de su cama sin darse cuenta solo por moverse mucho durante la noche?, ese es uno de mis problemas, creo que si duermo con alguien en la misma cama yo ocuparía el 90 porciento de la cama y la otra persona el otro 10 porciento, pobre del que duerma conmigo en un futuro, amen.
-si voy a ir, pero, deben ser dos chocolates- uno de mis segundos dones es de persuadir a las personas, él pone cara de estarlo pensando, porfavor que funcione, falta la carita de perrito, eso si que no falla, al ver su cara de derrota se que en un par de horas tendré a esos chocolates en mi poder.
-bien,¿ sabes que eres una pequeña manipuladora?
jajajaj que les dije, un maravilloso don.
-solo dame diez minutos y estoy lista-al levantarme del suelo siento un pequeño mareo, mi papá me queda mirando preocupado- ¿estas bien?- viene hacia mi y me ayuda a levantarme- deberías hacer mas ejercicio, debe ser por eso-después de que le dijera que estaba bien se fue a al primer piso, ya que mi habitación estaba en el segundo.
sabia que cada vez que me daba un mareo o un dolor de cabeza era porque uno de ellos iba a aparecer, no una persona viva, que por conclusión que no puedo tocarlos, ya que una vez pensaba que había un ladrón en mi casa, estaba sola en la noche y veo a un hombre en la cabeza, se notaba que era ya de edad, piel arrugada, pelo canoso, pero lo que me sorprendió fue que por medio de su cuerpo se podían en algunos de los objetos de mi casa.
intente pegarle con una escoba pero como pensé la escoba no le hizo nada, en ese momento me di cuenta que no eran personas.
esto empezó como hace seis años, cuando tenia once , no quise contarle a nadie, primero porque pensé que me verían como loca, y segundo que siempre fui muy curiosa queriendo descubrir las cosas por cuenta propia.
afrente mío había una niña, no debía tener mas de seis o siete años, vestía un vestido, solo diré que no era de nuestra época, mas bien como de entre 1900, no le tome importancia , siempre habían fantasmas nuevos, niños, jóvenes y adultos, de todas las edades,.
después de cambiarme fui a buscar mi papá, él por supuesto ya estaba listo, nos subimos al auto, un Nissan juke rojo, estaba lloviendo, la mayoría de los días del año llovía, vivir en Albany, Oregón, uno tenia que acostumbrarse a la lluvia, si no te gustaba la mejor opción era mudarte otro lugar, en la escuela solo tenia a una amiga, Gretel.
digamos que es como lo opuesto a mi, pero quizá por eso nos complementamos, a ella le gustan las fiestas, es atrevida, si la retas a besar a un chico en la calle, bueno, ella lo hará, pelo largo negro, delgada, ojos cafés, pero una loca de manicomio, en eso se podría decir que es igual que yo.
llegamos al supermercado le doy nos bajamos, antes de ir a la sección de dulces le di la lista de comprar a mi papá, al caminar hasta los dulces, mejor correr sip, me voy sacando el gorro del polerón que llevo puesto, al ya tener los chocolates me quedo parada en medio del pasillo donde están las frutas, a unos cinco metros hay un mimo, haciendo girar una pelotas, pero obviamente no van a dejar entrar a un mimo a hacer un show en medio del pasillo de las frutas.
cara blanca, con dos circulos rojos en sus mejillas, ya sabia que no era una persona viva, me quedo un momento mirándolo, era graciosos, una sonrisa se instala en mi rostro, si una persona me llega a ver pensaría que estoy loca por estar sonriendo a la nada, pero mi sonrisa se va borrando cuando veo a un chico con una capucha negra mirando hacia donde estaba mirando unos segundos antes.
al mimo.
ese chico estaba mirándolo, pero no podía ser, solo yo los podía ver, al igual que yo tenia una sonrisa en su rostro, ya que tenia el gorro del polerón puesto no se podía ver muy bien su rostro, pero pude ver una piel blanca, nariz recta, mandíbula marcada, era guapo, aunque solo podía ver eso, además de ser delgado se podían ver un atisbo de músculos debajo de su ropa, y quizá 1.80 de altura, pego un salto de susto cuando este se da vuelta y me queda mirando, sus ojos conectan con los míos, unos ojos demasiado oscuros como para que sean reales, él mira de reojo al mimo, yo hago lo mismo, fue mala idea, ya que al parecer él se dio cuenta, y yo igual.
estábamos viendo al mismo fantasma, él los podía ver, y yo igual , una sonrisa empieza a aparecer en su rostro.
holaaaa, soy nueva en esto :)), denle amor y cariño para poder seguir escribiendo, si hay apoyo tendré mas motivación para poder hacer mas capitulo y poder terminar la historia, dejen su voto y compartan si les gustó.
ailama fuera.
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exspiravit
Romanceno conocí a mi papá, siempre pude ver cosas que los demás no veian y esa era mi mayor pregunta , lo conocí a él, un demonio, que me ayudará a abrir la puertas que yo creía cerradas, oscuridad, invisible a ciertos ojos. pero solo podre saber la ve...