Capítulo 8

232 52 6
                                    


Mis manos se deslizan por su negro cabello, tirando suavemente de él, mientras sus labios se apoderan de mi cuello. Chupa y lame lentamente, torturándome. Me es imposible quedarme quieto y más aún cuando sus manos comienzan a deslizarse por mis costados, hasta llegar al elástico de mi pants de pijama.

-Zee-. Un gemido se escapa de mis labios cuando muerde mi clavícula. Su boca comienza a descender nuevamente hasta llegar a mi pecho. Me retuerzo y jalo aún más sus cabellos cuando sus dientes muerden mi pezón derecho-. Zee, por favor-. Suplico.

Mis piernas se enroscan en su cadera y lo hago bajar hasta que nuestros miembros rozan entre sí, a pesar de las capas de tela que los divide. Zee abre la boca, pero ni un sonido brota de sus labios. Lentamente, empiezo a mover mis caderas mientras deslizo mi diestra por los brazos de Zee, hasta que esta se cuela entre nosotros. Nuestros labios se rozan, imposible de unirse antes las fuertes sensaciones del placer.

Es una locura. Todo es demasiado. Parece un sueño... entonces, Zee sube quedando a mi par. Sus cálidos ojos cafés se encuentran con los mío y no siento nada.

-Estoy soñando ¿no es así? -. Sé que no me equivoco cuando él sonríe ladinamente y entonces todo se desvanece.

Abro los ojos y confirmo que aún es de noche, cuando miro mi despertador. No son más de las tres de la mañana. Me siento en el borde de mi cama, mientras tallo mi cara en un intento desesperado por desaparecer aquel sueño. Pero es inútil. Ha pasado una semana desde que Zee me dio la noticia. No ha sido fácil.

No puedo entenderlo. Lo he visto por tanto tiempo y jamás sentí nada por él, aunque claro, no lo conocía como lo conozco ahora. ¿Qué tiene de especial Zee Pruk? ¿Cómo hiciste para filtrarte en mí? ¿Qué fue lo que cambio?

"Soy el peor amigo"

(...)

- ¡Saint! Soy el chico más feliz.

- ¿Aprobaste historia?

-Sí, he pasado con siete. Pero eso no es lo importante ahora.

- ¿No?

-No. Zee me dijo que le gusto y me pidió ser su novio. 

.

.

Aquellas palabras no hacen diferencia, a las de las de ahora. La sonrisa de Gulf es enorme mientras me platica de la cita romántica que tendrá con Zee, el siguiente fin de semana.

-Enserio, Saint, sé que algo está planeando. Siempre tenemos citas, pero solo en momentos especiales me lo pide con anticipación. ¿No sabes nada?

-Que podría saber-. Respondo-. Zee y yo solo somos compañeros de trabajo, tú eres el novio.

-No es así- Niega, mientras se lleva una uva a su boca-. Sé que él y tú, ahora se llevan más. Y la verdad es que eso me pone feliz. Mi novio y mi mejor amigo siendo amigos. Me agrada la idea-. Asiento con la cabeza, no muy convencido-. Saint... Si supieras algo, me lo dirías ¿cierto?

-Si

-Lamento ser insistente, pero es que... quizás estoy confundiendo todo-. La duda invade su rostro, mientras hace figuras invisibles en la isla de mármol -. La visita de Fluke me hace dudar. Sé que aún le gusta Zee. Quizás no sea la cita romántica que estoy imaginando. ¿Y si quiere terminar conmigo?

-Zee te quiere, Gulf-. Comento, levantándome de la mesa, para apagar la estufa.

- ¿Tú crees?

-Si

I'm Sorry Friend Donde viven las historias. Descúbrelo ahora