Donde Bakugo es sordo.
Al ser estudiante universitario, Bakugo tiende a ser reservado, aún sabiendo que hacer amigos es más difícil de lo que parece.
𝖠𝖽𝗏𝖾𝗋𝗍𝖾𝗇𝖼𝗂𝖺𝗌:
• AU sin quirks
•Menciones de suicidio y bullying.
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Me senté en la habitación del hospital junto a Bakugo, y la madre de Midoriya, Inko. Midoriya estaba en una cama de hospital, inconsciente.
—¿Se va a poner bien? —murmuró Bakugo, con las manos temblando suavemente. Me acerqué y le agarré la mano.
—Se pondrá bien —las lágrimas cayeron de sus ojos mientras miraba a su mejor amigo.
—¿Tía Inko? —dijo Bakugo sintiendo su voz ahogada.
—¿Hm? —suspiró.
—¿Está bien querer lo que él hace? ¿Anhelar la muerte? Lo envidio, pero lo extraño.... ¿es tan malo?
—Cariño, no quieres lo que él tiene.
—¿Me estoy perdiendo algo? —pregunté.
—Él ehh... bueno uh... los doctores me dijeron que se tomó una botella entera de analgésicos.
—No... él... él no haría eso... ¡ÉL NO HARÍA ESO! —comencé a gritar.
—Cálmate Kirishima...
—¡¿Cómo podría?!
—Le hacían bullying en la escuela... puedo entender por qué lo haría. Pero me duele que lo hiciera.
—Sólo quería que se detuviera —una voz vino de la cama del hospital. Todos nosotros, excepto Bakugo, nos volvimos al centro de la habitación. Midoriya estaba acostada allí con los ojos abiertos—. Nunca pudiste entender mamá...
—¡Pero no debiste haber hecho eso! —su madre gritó.
Él se disparó hacia adelante y la miró fijamente.
—¿Se supone que debo disculparme por ello? No me ayudaste, ¡¿qué se supone que debía hacer?!
—Izuku...
—¡NO! ¡CÁLLATE! ¡DEJA DE HABLAR POR UNA VEZ, JODER! ¡TRATAS DE HACER QUE TODO SEA MEJOR PERO SÓLO LO EMPEORAS!
Un médico entró y Midoriya corrió hacia él, envolviendo con sus brazos al hombre alto de pelo verde.
—¡Papá! —Midoriya gritó en su pecho mientras el hombre pasaba suavemente su mano por la espalda de Midoriya.
Bakugo me miró antes de volverse hacia la madre de Midoriya y suspirar algo.
—No te preocupes, ¿bien? —dijo ella mientras suspiraba.
Luego se volvió hacia mí.
—¿Qué está pasando? —preguntó—. Ella no me lo dirá.
—Estaba gritando —suspiré.
—Oh...
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