Maldito Demonio

Finalmente

"Ne Shizuo ... quédate quieto por un segundo ¿de acuerdo ...?" Murmuró Izaya, inclinándose aún más hacia adelante.

"Yo ... solo quiero probar algo ..."

Y luego sucedió.

Shizuo solo estaba pensando en qué demonios pensaba Izaya que estaba haciendo, porque simplemente no podía ser lo que parecía-

Pero no nos equivoquemos. De hecho, era lo que había pensado que haría.

De repente hubo labios que se conectaron con los de Shizuo.

Izaya no recordaba exactamente cuándo había cerrado los ojos, pero ahora que se dio cuenta de que lo había hecho, se alegró de haberlo hecho.

Estaba casi seguro de que si veía la cara de sorpresa de Shizuo lo abofetearía, o algo en lugar de besarlo, y se largaría de inmediato.

Pero de esta manera, realmente no fue... tan malo.

En realidad, todo lo contrario.

Suavemente, movió sus labios contra los del rubio. Su lengua se deslizó por sí sola y lamió el labio inferior de Shizuo. No solo iba a hacer esto como una adolescente, si iba a intentar esto, entonces tenía que ser real.

Quería volver a sentir esta sensación. Esta extraña sensación hizo que su estómago se revolviera de una manera agradable cuando Shizuo lo besó afuera. Quería repetirlo para descubrir por qué estaba tan ... cautivado por él.

A Shizuo le dijeron que no se moviera, pero él simplemente no pudo, no abrió la boca para la lengua que pedía entrar.

Con avidez, separó los labios, dando la bienvenida al músculo cálido y lo trazó con su propia lengua.

De lo contrario, no se atrevió a moverse.

Había besado al cuervo dos veces. Bueno, a estas alturas tres veces si esto contara.

Si bien solo estaba probando las cosas con el primer beso, tenía otras intenciones con el segundo. Claro que Izaya estaba un poco asustado, pero aún así. No solo lo estaba besando para calmarlo como había dicho.

Porque se sintió realmente genial. Ese repentino afecto que sentía por el cuervo lo confundió muchísimo. Pero si se sentía tan bien estar confundido, entonces no le importaba volverse aún más difuso.

Así que se mantuvo quieto, porque estaba bastante seguro de que en el momento en que se moviera o dijera algo, Izaya se retiraría instantáneamente.

Suavemente sintió los labios contra los suyos y esa suave lengua dentro de su boca, deslizándose suavemente junto a la suya.

Sin embargo, era muy difícil no apartar nada de su lengua. El cuervo estaba básicamente a unos pocos milímetros frente a él. Y para ser honesto, ya no solo quería besar al cuervo.

Se encontró extrañamente ansioso por tocarlo. Quería envolver sus brazos alrededor del cuervo y acercarlo.

Poco sabía él que a Izaya probablemente no le habría importado demasiado si hubiera envuelto sus brazos alrededor del cuervo durante este suave beso.

Porque en realidad, se encontró disfrutando de esto incluso más de lo que pensaba. Incluso más de lo que disfrutó del beso en las calles.

Y fue jodidamente confuso.

¿Qué dijo ese demonio?

¿Estaban destinados a estar juntos y ese vínculo especial entre ellos aceleró su enamoramiento...?

Básicamente...?

Tenía que admitir que estaba inclinado a creerle a este demonio solo por una vez un poco. Porque no podía explicar este crecimiento tan repentino y rápido.... afecto..?