𝙿𝚊𝚛𝚝𝚎 6/10 🌸

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—Los días son hermosos aquí en Busan ¿No lo crees?—mencionó mirando por el balcón de su habitación—Fue un viaje cansado.

—Concéntrate enano—se quejó dándole un sape al más bajito—Por ahora solo debemos enfocarnos en encontrar al objetivo.

Y así lo hicieron.
Después de desempacar las pocas cosas que decidieron llevar a ese espontáneo viaje, decidieron recorrer todo el hotel y los lugares cercanos en busca de aquel rubio, causante de su cercano fracaso en el amor.
Pero pese a que las horas transcurrieron, y el hotel no era tan grande, aún no lograban dar con el.

—Ahí está Park, acaba de entrar a los baños—exclamó Woozi alarmado—Aún no hay señales de que tenga puesta la pulsera.

—Es un alivio—suspiró liberando toda la tensión acumulada.

—Ve y quítasela.

—¿Estás loco?—se quejó—¿Qué le voy a decir?

—Qué es tu pulsera y que te la devuelva—comentó con obviedad

—No puede ser tan fácil. Necesito un plan.

—Min, olvídate de planes, solo ve por la bendita pulsera.

No es como si pedírselo fuera tan difícil. Él era el vicepresidente y el rubio un simple secretario, pero...había algo que le impedía al peli negro siquiera acercarse a él, al menos, no sin sentirse extraño.

Con lentitud y nerviosismo entró al baño de hombres, repasaba en su mente las posibles palabras que diría a continuación para reclamar lo que era suyo, pero fue más su sorpresa al escuchar unos fuertes sollozos provenientes de la tercera puerta

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Con lentitud y nerviosismo entró al baño de hombres, repasaba en su mente las posibles palabras que diría a continuación para reclamar lo que era suyo, pero fue más su sorpresa al escuchar unos fuertes sollozos provenientes de la tercera puerta.

—Hola—se atrevió a decir causando un poco de eco en el lugar—¿Está todo bien ahí adentro?

Después de unos segundos de silencio, la puerta se abrió dejando ver a un chico rubio con los ojos rojos y sus labios formando un puchero.

—Disculpe si interrumpí sus necesidades—dijo limpiando su nariz con un pañuelo.

Y ahí todo el mundo del peli negro se vino abajo, cuando vio en su muñeca, aquel cerco de metal, el cual adornaba y llamaba la atención.

¡El chico se había colocado la bendita pulsera!

—Oh, no, yo solo...

—¿Vicepresidente Min?—exclamó sorprendido y enseguida un rubor se hizo presente en sus mejillas —¿No vendría hasta el día de su nombramiento?

—Quise llegar antes para ver qué tal las cosas por aquí —respondió—Pero tú...

—Park Jimin—completó en respuesta a su repentino silencio.

—Park Jimin, ¿Se encuentra bien? ¿No se siente un poco raro? ¿Tal vez hacia mi persona?

Porque el no estaba para nada bien.

—Si, estoy completamente bien—contesto pero sin duda se podía apreciar cierta pizca de sarcasmo—Y-yo, solo tuve un problema con mi jefe.

—¿La tienes?—preguntó una vez visualizo a su amigo entrar a la habitación—Dime que la tienes

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—¿La tienes?—preguntó una vez visualizo a su amigo entrar a la habitación—Dime que la tienes.

Pero sus esperanzas se rompieron cuan cristal al ver el rostro tan demacrado de Min.

—Yo...—se rascó la nuca—¡No pude!

—¿Bromeas Min YoonGi? Solo tenias que hacer una cosa sencilla y ni eso pudiste hacer.

—¡Se puso la pulsera!—exclamó desesperante.

—¡¿Qué?!—dijo ahogando un grito.

—Además, se sentía mal, no fue un buen día para el gracias al estupido del director Choi, no pude.

—Bien, tranquilicémonos —se resignó controlando su respiración—Mañana, irás, y de manera casual lo invitarás a desayunar, y vas a pedirle de la manera más cordial esa pulsera. Se resolverá, tiene que.

—Lo haré—contestó acostándose en una de las camas, necesitaba descansar y despejar su mente—Debo hacerlo.

—Min—susurró recostándose de igual manera —Estuve pensando.

—¿Y no te dolió?—dijo burlón.

—Soy tu mejor amigo, casi hermano—dijo mirándolo de mala gana—Debo saber la verdad.

—¿A qué quieres llegar?—lo miro frunciendo el ceño por tanta seriedad en el asunto.

Tanta seriedad en el castaño, no era normal.

—¿Por qué odiabas tanto a tu padre?—por fin se atrevió a preguntar. Se lo había estado preguntando desde hace mucho, pero jamás había tenido el valor para hacerlo.

En cambio, el peli negro en definitiva no esperaba esa pregunta, pregunta qué hizo que su pecho se estrujara.

—Hasta mañana Woozi—le ignoró dándole la espalda—Ya duérmete, mañana tenemos asuntos que resolver.

🌸 𝙴𝚁𝚁𝙾𝚁/ 𝚈𝙾𝙾𝙽𝙼𝙸𝙽 [Mini Fic] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora