𝙿𝚊𝚛𝚝𝚎 7/10 🌸

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—Buenos días—soltó con emoción a sus espaldas y con un toque de nerviosismo.

El chico algo sobresaltado, giró sobre sus talones topándose con alguien que no esperaba. Es decir, en la oficina difícilmente llegaba a encontrárselo, pero a partir de aquel asunto en l recepción se lo topaba en todas partes.

—Señor Min, ¿Qué lo trae por aquí tan temprano?

—No me digas Señor, me hace sentir viejo, dime Yoongi—contesto tomando uno de los platos en aquel buffet—Solo Yoongi.

—De acuerdo...Yoongi—dijo con la timidez a flor de piel.

En su vida se había imaginado una interacción con el vicepresidente de la empresa donde trabajaba. Siempre lo había visto como una persona inalcanzable.

—Vine a invitarte a sentarte conmigo para desayunar—exclamó sonriente.

—¿A mi?

Si. Eso era un extraño y repentino acercamiento.

—Vamos, no puedes decirme que no.

Pero le gustaba.
Que digo gustar, le encantaba ese acercamiento.

Los días pasaron

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Los días pasaron.
El tiempo, es un concepto abstracto para definir el movimiento. Pero cuando Min Yoongi hablaba con aquel chico de pelo rubio, todo se detenía y el concepto del tiempo para él no existía.

El reloj dejaba de andar y, el objetivo principal de su cercanía, le importaba poco. Solo era un pretexto.

Porque de algún modo, sentía como si viviera para siempre.
Aquel chico hacía que le interesasen hasta los temas más absurdos, más triviales. Cualquier cosa que salía de su boca, parecía poesía, música y reflexión.

Aquel chico decía que odiaba su voz, decía que no tenía nada de melódica. Pero el pelinegro pensaba, que si el rubio, le prestara atención, sin ningún otro sonido ante sus oídos y se escuchará hablar, su amor propio crecería hasta volverse narciso.

Cuando aquel chico pronunciaba una palabra, el mundo del peli negro se acallaba.
Su voz retumbaba en cada esquina de su oído, incluso cuando no decía nada. Y lo mejor de sus palabras, es que la mayoría no salían de su boca, sino de su alma. Llevaba la honestidad en cada frase.

En cambio, para el rubio, esto era aquello por lo que había estado esperando durante un largo tiempo.
Pues los miles metros de distancia que le guardaba a aquel ser inalcanzable, se habían reducido drásticamente.

En lugar de ver solo su espalda, podía observar sus ojos.

Ya no hacía falta rogarle al cielo el poder tenerlo cerca. Porque en ese instante, aquel, estaba a su lado.

—¡Deberíamos pescar!—exclamó el peli negro frenando frente a la gran piscina del hotel.

—Me temo que ahí no hay peces.

Pero sin hacerle caso alguno, se dispuso a saltar sin importarle qué aún tuviera puesto su costoso traje.
Y al rubio sin importarle en lo más mínimo que no encontrarán peces, o hacer el ridiculo frente a las personas que pasaban por el lugar, se aventó siguiendo su juego.

Sin darse cuenta, la pulsera resbaló de su delgada muñeca gracias al agua. Y quizá se perdió al fondo de aquella alberca.

Pero los sentimientos de Park permanecieron.
Los sentimientos de Yoongi apenas estaban por encontrarse.

🌸 𝙴𝚁𝚁𝙾𝚁/ 𝚈𝙾𝙾𝙽𝙼𝙸𝙽 [Mini Fic] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora