CAP. 8 "ESTAMOS AQUI"

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Martes

18 / Septiembre /2028


Habían pasado 3 semanas desde aquella platica con sus padres, hasta el momento no habían tenido ningún problema. Katsuki había tomado sus medicamentos como la doctora se lo indicó y gracias a esto no había tenido cambios drásticos de humor frecuentemente.

Todo marchaba bien...

-Kacchan- habló el omega desde la mitad de las escaleras llamando la atención del alfa.

-¿Qué pasa nerd? - preguntó el alfa con las manos en los bolsillos del pantalón que tenía por pijama. Estaba en los primeros escalones de arriba.

-Nada- lo pensó unos segundos - es decir te quedaste ahí parado y no me respondiste.

-...- es cierto, estaba bajando las escaleras junto al omega para ir a desayunar, este le estaba preguntando algo y antes de poder responder a su pregunta su... mente se quedó en blanco. Esto no le agradaba.

-¿Kacchan?- lo miro con duda. El alfa se había quedado escalones arriba de Izuku, así que avanzó 2 escalones para estar más cerca de él pero Katsuki lo sorprendió.

-No es nada nerd- bajó dos escalones quedando al mismo nivel del omega posicionándose a su lado izquierdo- vamos a desayunar- revolvió suavemente el cabello del omega con su mano izquierda.

-Si...- no podía evitar sentirse preocupado por su esposo pero estaba feliz que las cosas marcharan bien.

La doctora les había explicado que todo depende de cómo avanzará la enfermedad en Katsuki pues había casos en los las personas logran vivir hasta 25 años con esa enfermedad, obviamente haciendo la situación más difícil para su familia... pero normalmente la mayoría de los casos morían entre los 3 y los 11 años después de diagnosticar la enfermedad.

"Ahora todo depende de cómo reaccione Katsuki..."

Tenía esas palabras rondando en su cabeza, sabía que en cuanto empezara a olvidar a las personas comenzaría un camino sin retorno.

.

Estaban preparando el desayuno juntos cuando escucharon los gritos de todos los días, se dirigieron hasta las escaleras y ahí estaban, sus pequeños cachorros, subieron las escaleras y como de costumbre Katsuki cargo a la pequeña Midori mientras Izuku cargaba al pequeño Katsuo. Bajaron juntos las escaleras y colocaron a los cachorros en su lugar.

Katsuki preparaba los biberones de los pequeños mientras el pecoso servía la comida. Una vez listo ambas cosas se sentaron juntos en la mesa para poder desayunar, el plato de los pequeños tenía un poco de arroz y verduras al vapor, mientras el de los mayores tenían un plato de arroz, un plato con huevos estrellados y tocino, por último tenían verduras al vapor, mientras Katsuki tenía una taza de café cargado Izuku tenía una taza de té combinado con un poco de leche.

Desayunaron entre risas, besos y gritos. La pequeña Midori no quería comer por sí sola y le había hecho un berrinche a su padre para que le diera de comer y no solo eso, también lo obligó a usar el truco del avión, Izuku solo se reía ante esa dulce escena, le había causado tanta ternura que terminó grabando aquella escena. El alfa solo gruñía por lo bajo, no era por molestia de que su cachorra lo obligara a hacer eso, más bien era por la vergüenza que le ocasionaba hacerlo.

No pudo evitar mirar a Izuku por encima del hombro y lo que vio lo cautivo. Izuku tenía los mofletes rojos y pequeñas lágrimas en los ojos de tanto reír, el rojo de sus mejillas hacía resaltar más las pequeñas pecas que tenía en estas, esas pecas que le hacían querer morder sus mofletes hasta que llore, y aunque suene poco romántico ambos sabían que era su forma de demostrar cariño. La sonrisa que tenía en ese momento era de lo más tierno, esa sonrisa que hacía que babeara por él, el sonido de su risa era música para sus oídos, sus hermosos ojos jade que parecían brillar de la felicidad...por ultimo su aroma, joder ese aroma que lo tenía loco. Para Katsuki el aroma de Izuku era jodidamente perfecto, nunca había sentido algún tipo de atracción por algún aroma u omega, hasta que lo conoció la mayoría de los aromas en omegas eran dulces y empalagosos, en cambio con Izuku la menta y el limón lo hacían perfecto. Las feromonas de felicidad era el mejor complemento...No podía pedir nada más en el maldito mundo, era feliz... al menos lo sería por un tiempo.

I NEED YOU, I'm still here...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora