Olor A Hogar

Extra! otra versión del cap 8

Esta idea me nació gracias al comentario de Cerezo572con su hipótesis de que pasaría en el próximo capitulo y me gustó tanto que quise cambiar todo el plan que tenía para adaptarlo a este, pero llegó un momento que ya no supe cómo continuarlo, se me quedó muy atorado y todo lo que se me ocurría me parecía muy cutre, forzado y nada orgánico, por lo que deseche la idea. Una amiga lo leyó y me ha animado a compartirlo y también me maldijo por no seguir esta línea y también me agredió... Carol cabrona ♡

Puedes simplemente ignorar este capítulo y quedarte con el final feliz, esto solo son unos sucesos alternativos y no afecta nada a lo que ya leíste.

Kakashi respira profundo llenando completamente sus pulmones de aire y lo suelta con calma para relajar todo su cuerpo y hace la señal.

El iba en la cabeza liderando la incursión, bajo doce escalones antes de poder tocar el suelo del lugar, se encontró delante de él un pasillo ligeramente inclinado hacia abajo de un largo enorme que se perdía en una oscuridad perturbadora, como en los planos que le habían enseñado esto iba a ser un hormiguero.

El lugar era oscuro con una iluminación tan pobre que apenas se veía a su alrededor, el aire estaba enviciado y a cada bocanada podía oler y sentir el moho de las esquinas, al final del pasillo este se dividía en cuatro direcciones diferentes, se paró en medio intentando detectar el más mínimo olor a Gai, pero no podía oler nada, entonces aunque extremadamente endeble, pudo escuchar lo que estaba seguro era el llanto de un omega.

Se dirige a ese pasillo dejando que los demás se dividan en los restantes mientras él baja mas y mas hasta que al fin se cruzo con alguien a quien noqueó de forma hábil y extremadamente veloz, había dado la orden de no matar a nadie a menos que fuera necesario.

A partir de ese momento se comenzó a cruzar con mas y mas personas que esquivaba para que los demás se encargaran de ellos y el ir directamente a Gai evitando que se lo pudieron llevar o algo peor, vio la luz intensa de un pasillo y de ahí podía escuchar los gritos.

Puertas gigantes de hierro estaban meticulosamente alineadas de lado a lado de el pasillo bien iluminado y limpio, dando una sensación opresiva y estéril, escuchó los gritos y llantos provenir de una de esas puertas, con el chidori en su mano brillante y mortal, terminó reventando la cerradura.

Al abrir la puerta se encontró con una omega llorando desconsolada, toda la habitación olía a miedo y sangre, ella le miró implorando ayuda y la pudo reconocer, cabello color aqua e iris naranjas, una habitante de la cascada descendiente de ninjas con un kekkei genkai único. 

Su pecho se hundió en dolor al ver la escena imaginando a otra persona en el lugar de la mujer, tres hombres la sujetaban a la fuerza mientras ella traía a su cachorro al mundo. En lo que dura un parpadeo noqueó a los tres hombres alejándolos de ella, que todavía tenía un pánico y un miedo enormes grabados en la cara que se mezclaban con el dolor del propio parto, con cautela se acercó para intentar relajarla mientras llamaba por que venían los ninjas médicos, una vez estos entraron en la habitación y la comenzaron a atender el salió encontrándose a los niños ordenándoles que abrieran las demás puertas mientras el salía disparado de ese lugar, ahí no estaba Gai.

Dejó que su instinto le guiará llevándole a unos pasillos alejados, más oscuros y abandonados, estos estaban rodeados de un silencio y ambiente a muerte. 

Ahí lo pudo notar tan débil que parecía que fuera su imaginación, corrió a la puerta en la que había detectado el olor, abriéndola sin demasiada dificultad, era una habitación pequeña donde apenas cabía una cama individual pegada a la pared, ahí contra la esquina de la pared encima de la cama estaba Gai con la cabeza escondida entre sus piernas recogidas, no fue capaz de notarlo, solo cuando ya estaba a su lado fue cuando levantó la cabeza, se veía tan pálido, con una cara tan cansada con ojeras muy marcadas y sus ojos, sus ojos no brillaban, no hasta que se llenaron de lágrimas deshaciendo su postura para abrir los brazos.