Lemon Juice

"¿Tu te irás?"

Estaba tan cerca a mí. Quería quitarla. Quería alejarme y hacer específicamente lo contrario a lo que pidió.

No entiendo por qué me contradigo. Quizá ya que lo tengo, se volvió una tragedia.

La solté. No dije nada. No sabía que iba a decir. No sabía que decir.

No sabía que hacer.

Miré lejos de ella, a sus espaldas. Estaba ahí Eduardo, su rostro expresaba ira. Aparté la mirada.

Ella me miraba la cara con lágrimas en los ojos.

No sé si estoy en ése momento de lucidez, dónde soy conciente de mi inconsciencia. O si soy presa de la acidez que desprende el romance.

No quería verla.

Giré la mirada hacia la izquierda. "Quieres no querla" - Pensé.

No sabes qué es lo que quieres; ¿qué podrías querer más allá de lo material?

"No lo sé, ¿qué quisieras tú?"

Sabes la respuesta.

"Por más que lo intentes, no puedes cambiar el pasado, Saito".

Y por más que pique la espina, no dejará de doler, Saito.

"Puedes acostumbrarte a sentir dolor".

Pero podrías luchar para cambiarlo.

"No. No puedo"

¿Por qué no podrías?

"Hay mucho ruido".

Le temes al silencio.

"¿Por qué tú no?"

Porque soy tú.

"¿Qué nos hace distintos?"

El punto de vista.

"No pensaré más"; volví a pensar.

- ¿Saito?

La volví a mirar. Se veía tranquila.

- ¿Cómo te sientes?

Mal, claro. No contesté.

Ella tampoco.

- Bien, claro. ¿Por qué la inquietud? - Mi voz sonó tranquila.

- ¿Mientes?

- Siempre.

- ¿Por qué?

- Le temo a la verdad.

- ¿Duele?

- Sí.

- ¿Cuánto?

- Mucho; ¿a tí?

- Me dueles.

- ¿Por qué?

- Porque te quiero…

- ¿Para qué?

- No es "para qué".

- ¿Por qué no serlo?

- Porque hieres.

- ¿Es malo?

- Dime, ¿quieres hacerlo?

- No. No quiero.

- ¿Lo haces?

- ¿Lo hago?

- ¿Lo hice?

- Sí.

- Perdóname…

- ¿Qué es perdonar?

- Olvidar que dolió.

- ¿Y si aún duele?

- Volver a pedir perdón.

- ¿Cómo saberlo?

- No se sabe.

- ¿Cómo volver a pedir perdón?

- No lo sé, ¿cómo?

- No lo sé.

- ¿Saito?

- Evie…

- Perdóname…

- Aún duele…

- Perdóname…

- ¿A ti te duele?

- Sí…

- Lo siento…, perdón.

- ¿Saito?

- ¿Evie?

- No te vayas…

- ¿Tu te irás?

- No.