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Se dice de la lujuria, que es la agonía más placentera,
Porque mueres en tu piel mientras tu carne desespera.
Que te puede hacer arder, en llamas si lo quisiera,
Que es la sombra del amor, aunque no lo pareciera.
Muchos juzgamientos se realizan tristemente a la pasión.
Opiniones se dispersan como un Diente de León.
Unas dicen que no importa, vuela la imaginación,
Y otras dicen que si pruebas, perderás la salvación.
Pero ellos no sabían en verdad sobre nosotros,
Que los que hayamos el amor en verdad somos muy pocos.
Que amar es humanidad, no cosa de estar locos.
Que se puede ser feliz sin importar lo que hagan otros.
Nunca entendieron el enlace entre dos corazones iguales.
Entraron a toda fuerza, y utilizaron sus pedernales.
Encendieron una hoguera y crearon calamidades.
Te amarraron a una de ellas, te gritaron inmoralidades.
Yo te miraba desde lejos, mientras negabas con la cabeza.
Entre lágrimas te vi morir sin perder tu entereza.
Te vi quemarte al calor, del miedo volverte presa.
Y he entendido que el amor, es más grande que la belleza.
Derramo lágrimas sobre lo que recogí de tus cenizas.
Justo antes de volatizarlas con el corazón ya vuelto trizas.
Sobre ellas yo soplé, con mi rostro sin sonrisa.
Como tú al diente de León, esa tarde la cornisa.
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Este poema está inspirado en el amor homosexual en épocas de la Santa Inquisición. ¡Cuantas historias de amor silenciadas!
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Cartas A La Muerte (Poemario) ©
Thơ caVersos góticos cargados de romanticismo oscuro y misticismo, en donde la muerte y lo esotérico se roban el protagonismo y la hipocresía junto a los más oscuros y profundos secretos del ser humano siempre quedan en evidenciada. Rankings: #1 en Eso...
