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Pequeña actualización. Ya que creo que todos sois latinos, ¿se os hace raro leer la historia en español de España?
Creo que me entendéis :)
¡Disfrutad el capítulo!
~Dippy

Quizá esta parte de mi historia te resulte extraña... porque no tenemos que viajar mucho tiempo atrás. Solo unos pocos días.

¿Recuerdas cuando Patrick vino a nuestro mundo con la intención de darnos un objeto que al final nunca llegamos a utilizar?

No caí en quién era hasta que se fue. No recordé quién era. No sabía quién era. Y, créeme, ese es uno de los mayores errores de mi vida.

Veintitrés años atrás... bueno, veintitrés no, casi veinticuatro.

Mi madre recibió la gran noticia de la maternidad por segunda vez. Mi padre estaba ilusionado. ¿Mi hermano? Para nada.

No sé si tú, el que está leyéndome, alguna vez ha sabido lo que se siente. ¿Cómo sentirse al recibir un nuevo miembro en la familia? Saber que, a partir de nueve meses, tendrás un pequeño ser viviendo contigo y, con el paso de los años, sería algo más que un pequeño ser. Sería un hermano.

¿Cómo te quedas al saber que yo podría haber sentido eso?

Todo te cobrará sentido cuando te diga cuáles fueron los resultados de la primera ecografía de mi madre. Ella tendría gemelos.

Ahora tiene sentido, ¿verdad?

Supongo que no necesitas que te diga más datos. Ya te he relatado cómo fue mi entrada en este mundo, pero no te he dicho todavía cómo fue la suya... la de mi otro hermano, Patrick.

Remontémonos al siete de noviembre. Concretamente, por la mañana. Mi madre llevaba en el hospital desde el día seis con alguna que otra complicación.

Había demasiados médicos en esa sala, como es normal. Todos pendientes de mi madre.

El primer dolor tuvo lugar y el primer parto sucedió.

Puedo decir que yo era el hermano pequeño.

Patrick era pequeño, demasiado, tanto que necesitó la incubadora nada más nacer. Pasaron unas pocas horas hasta que falleció.

Puedes imaginar lo mal que lo pasó mi madre, pero ningún dolor se puede asemejar al de mi padre, quién ni siquiera tuvo oportunidad de ver a su segundo hijo.

Luego llegó mi turno, conmigo no hubo ninguna complicación aparte de todo lo que ya sabes.

Y lo peor de Patrick... es otro pequeño detalle. ¿Puedes imaginar por qué murió? Seguramente pienses algún tipo de problema prematuro o cosas por el estilo...

Pero esta es mi historia. Y eso es demasiado normal como para que me pase a mí.

Realmente, yo causé la muerte de Patrick, indirectamente.

No sé de qué manera se generó el toque dorado en mí, ya que soy la única persona con esa maldición, pero lo que sé es que a Patrick eso no le hizo nada de bien.

De alguna manera, yo estaba unido a él, sin terminar de desarrollarnos del todo, y el hecho de que hubiera una alteración en mí y no en él causó que el cuidado especial que recibía cayera también pasivamente en Patrick.

Básicamente, se le trató de una enfermedad que no tenía inconscientemente, y al hacerle creer a su mente que estaba enfermo, desencadenó una enfermedad aún peor que acabó con su muerte.

Complicado, ¿no?

Para mi suerte, Kassandra se apiadó de él. Patrick no me recuerda, no sabe que yo era su hermano, ni siquiera que llegó a nacer. Kassandra se encargó de camuflar esos recuerdos para protegerme.

Kassandra lo sabe todo. Gracias a ella, Patrick está ahora donde está, con un alto cargo en el espacio post-mortem, y viviendo tranquilamente allí. No como yo, que me toca ser un fracasado aquí abajo... pero no es tiempo de hablar del presente.

Para zanjar el asunto de Patrick por ahora, te hablaré de un detalle del que seguro no te has dado cuenta.

Revisemos un poco cómo es Patrick.

Su pelo, una mezcla de rubio, pelirrojo y castaño, que no tiene nada que ver con mi constante marrón.

Sus ojos marrones oscuros y profundos los mires por donde los mires.

A veces, llevando gafas de color negro.

Prácticamente siempre con un traje blanco...

Y siempre con su gorro.

Dorado.

Estoy seguro de que pensarás que es una pura coincidencia, que en el espacio post-mortem todos usan el dorado y que le queda bien, pero es todo lo contrario. Ese gorro fue un regalo de Kassandra a Patrick por su décimo cumpleaños.

Y, claro, tuvo parte de mí.

Al principio era negro, pero Kassandra me pidió que lo tornara dorado. Así, Patrick siempre llevaría una parte de mí con él y no lo sabría.

Me pregunto si ya lo sabe. Si la última vez que lo vi sabía quién era yo. Si la última vez que lo vi pensó en mí.

Pero es algo que nunca podré averiguar, ¿no?

Seguro que alguna vez te has preguntado más cosas sobre el espacio post-mortem. Quiénes más están por allí, de dónde ha salido, cómo se va... y realmente me gustaría poder darte detalles. Pero nunca he estado allí. Las veces que he podido hablar con Kassandra han sido cuando ella ha venido hacia el mundo mortal, pero nunca he pisado ese espacio. Solo conozco dos cargos más allí.

Y, bueno... como podrás adivinar, tampoco quedaron muy bien parados. Total, en el espacio post-mortem están todos los muertos, ¿no?

Ellos dos eran soldados, fuertes y hábiles. Tenían una hija que siguió sus pasos.

¿Cómo murieron? De momento te diré que murieron en un incendio, pero más adelante te contaré más cosas... porque ese incendio es más importante de lo que crees para mi historia. Lamentablemente para mí, es demasiado importante para mi historia.

Digamos que Kassandra decidió apiadarse también de ellos. Les dio un buen cargo, no como a Patrick que es literalmente su mano derecha, pero también tenían poder.

Porque, seamos sinceros... ¿quién no sentiría lamento hacia dos personas que murieron a causa de un atentado dejando a una pequeña hija sola?

Aunque, bueno... no me extrañaría que supieras quién es esa hija.

Y tampoco me extrañaría que ahora muchas cosas cobraran sentido...

¿Ahora sabes por qué contraté a Lince y Cénit  como soldados de Espectro?

Fortnite 0: Historia de una leyenda doradaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora