Nuestro Lado Oculto II

El engaño a la luz

Es la mañana del cumpleaños de Nayeon, por lo que Tiffany, antes de partir al departamento de sus hijos, contacta con Jessica a través de una video llamada. Ellas apenas y han tenido poca interacción, por las actividades de ambas.

—Jessi, amor. —Le saluda con su característica euforia.

—Estas preciosa. —Es lo que atina a decir Jessica de la mujer que ama.

—Por siempre. Te extraño tanto.

—Y yo a ti.

—Hoy es cumpleaños de

—Mi hija favorita. —Jessica, sorpresivamente menciona.

—¿Nayeon es tu favorita? —La propia Tiffany no se lo puede creer.

—Hoy hay que decir que lo es. —Hasta se ríe al decirlo.

—Eso es malvado pero tú eres así, ni siquiera le vas a hacer un maldito regalo.

—Ya hablamos de eso.

—Si como sea, por lo menos la vas a llamar para felicitarla.

—Le envié un mensaje. —Justo antes de aceptar la llamada con Tiffany.

—¿Estas bromeando? —La cree capaz de solo enviar un simple mensaje, aun así hace la pregunta.

—Estoy muy ocupada Fany, no tengo tiempo para hablarle. —Recibe una mirada asesina que hace que saque sus verdaderas razones— No sé qué decirle.

—¿Felicidades adorada hija?

—Dale el mensaje por mí, te dejo tengo que entrar a una reunión, te amo. —Y a pesar de la cara de indignación de Stephanie, le corta la llamada, escapando de ello.

Tiffany se queda molesta y solo no devuelve la llamada para no tener una discusión ahora que están a distancia, así que de momento lo deja pasar y parte al departamento de sus hijos.

Tiffany llega al departamento cuando precisamente Nayeon ha recibido el regalo de parte de la Darenogare, la cual no fue capaz de llevárselo personalmente ya que Nozomi le dio la idea de que era mejor enviárselo.

—¿Akemi te envió un regalo? —Pregunta Tiffany con asombro.

—Estoy tan sorprendida como tu mamá. —Nayeon comienza a abrir la caja, le da emoción por el tamaño de la misma.

—¿Dónde están tus hermanos? Es tu cumpleaños.

—Fui yo la que les pidió que hicieran un día normal. —Realmente no se ve muy feliz para ser su cumpleaños. Ella termina de abrir el regalo y lo que encuentra le gusta— Es un abrigo, me encanta.

—Llamemos a esa señora de una vez. —Es ella quien no pierde tiempo y marca el número de la japonesa.

—Fany. —Se escucha a través de la línea, Tiffany ha puesto la llamada en alta voz.

—¿Qué haces dándole obsequios a mi hija? A mí nunca me hiciste ningún regalo. —Hace el reclamo con su típica sonrisa, Nayeon de igual manera sonríe, esperando por la respuesta de Akemi.

—¿Estas segura? Porque si mal no recuerdo hice que te

—No vayas a inventar cosas. —La corta a tiempo— Tengo a Nayeon al lado y está escuchando todo.

—Y yo a Nozomi y creo que me va a matar cuando corte la llamada, no me vayas a colgar.

—Hija dile gracias a la señora Darenogare ya para cortar la llamada y que la asesinen.

—Gracias Akemi, tu regalo es lo mejor que he recibido en el día, las tacañas de mis madres no me han dado nada. —La menor se hace la mártir.