DIABOLIC

Capítulo 24

"Ella era una chica con buenas intenciones que tomó un par de malas decisiones y aprendió un par de lecciones. Desearía poder decirle"
-She, Selena Gomez.

La Madriguera era mi lugar en el mundo, allí era mas feliz que en ningún otro lugar. Talvez tenía que ver con el ambiente familiar que desprendía o con el hecho de que todos allí parecían quererse.

Era un buen cambio para mi después de casi dos años de solo ver muerte, tortura y desesperación.

"Aquí estabas"

Giré mi cabeza para ver a Ron acercarse y sentarse a mi lado en el jardín recién desnomizado. Reí un poco al recordar a George patear a un nomo luego de que este mordiera a Fred en la pierna.

"¿Me buscabas?"
"Mione y Tim están besandose de nuevo" dijo con cara de asco.
"¿Y al pequeño Ronnie no le gusta?" reí burlandome.
"Estoy traumatizado Sel" me miró fijamente haciéndome reír "¿Y tú?"
"¿Yo que?" fruncí el seño.
"¿Cómo estás? Con saber que te enfrentarás a Voldemort y eso" se encogió de hombros.

Pensar en Tom solo lograba confundirme, lo que pasó entre nosotros fue breve pero poderoso y aún después de tanto tiempo (literalmente mucho tiempo) aún pensaba en él.

"Voldemort y Tom son dos personas diferentes" me limité a responder.
"Eso espero porque no puedo imaginarte besando a ese monstruo sin nariz" bromeó haciéndome reír.
"¿Que hay de tu vida amorosa?" cambié de tema "Los gemelos mencionaron que saliste con Lavender"
"Pero ya terminamos" me aseguró rápidamente "Era insoportable"
"Dime algo que no sepa" rodé los ojos.
"¿Que harás cuándo veas a Harry? Recuerda que iremos por él mañana"
"Nada, todo será como antes"

Arthur y Remus habían hablado con Timmy y conmigo para ponernos al tanto de todo lo que había sucedido, incluyendo el hecho de que Voldemort podía meterse en la cabeza de Harry.

Eso explicó su comportamiento en navidad hace dos años, lo entendía perfectamente.

"Selena, querida" nos interrumpió Molly "¿Te importaría acompañar a Ginny al Callejón Diagon? Debe buscar el pastel para la boda de Bill y Fleur"

No me emocionaba ni un poco, pero jamás podría negarle algo a Molly Weasley. Ron me dió una mirada de ánimo y me dirigí a Ginny que me observaba con odio, aún no le caía bien.

Tomé su mano y nos transporté al famoso Callejón Diagon, el lugar estaba oscuro y sin vida, el único rayo de alegría provenía de la tienda de los gemelos, el mayor éxito del lugar en estos días.

"Iré por el pastel" dijo Ginny en cuanto llegamos a la tienda "Esperame aquí" y entró sin decir nada.

Mis ojos empezaron a escanear el lugar en busqueda de cualquier persona que pudiera significar un peligro y se detuvieron al identificar un rostro familiar.

Sentada en una banca, mirando atentamente la escena de personas caminando de un lado al otro, se encontraba una anciana de cabello blanco y ojos tristes. No dude en acercarme al reconocerla.

"¿Blair?"

Los ojos de Blair de dirigieron hacia mi y se abrieron sorprendidos. Notando que me había reconocido, me senté a su lado.

"Talvez esto te parezca raro..."
"No" me interrumpió "Dumbledore nos dijo todo sobre tí y Timothée en cuánto desaparecieron de la nada" me explicó "Supongo que no lo creí hasta ahora"
"Me alegra verte" le sonreí levemente, sin saber que decir.
"Él se volvió loco en cuánto te fuiste" dijo y el tono sombrío en su voz me indicó que hablaba de Tom "Trató de encontrarte por todos lados, incluso quiso hacer un pacto con el diablo para traerte de regreso"
"No lo hizo ¿o si?" pregunté preocupada.
"Alphard lo detuvo" aclaró "Aunque no habría importado" se encogió de hombros "Irá al infierno de todos modos, ¿no crees? Eso si Potter logra matarlo"
"Lo hará Blair" tomé su mano "Lo vencerá"
"Él ya no es humano Sel" dijo con lágrimas en sus ojos "Tom Riddle era apenas una persona pero este monstruo..." susurró "Él mató a Alphard y a Walburga"
"¿Que?" susurré sin poder creerlo.
"Ronan y Alphard también murieron. Al igual que mi hijo y mis nietos" siguió "Todas las personas que amé están muertas" comenzó a llorar.

Mi corazón se rompió como aquella vez en dónde ella me contó la historia del chico que amaba. Esa Blair había desaparecido hace tiempo. La Blair enfrente de mi estaba rota y asustada, consumida por la oscuridad que la había rodeado por tanto tiempo.

"Pero bueno" río amargamente "Pronto moriré yo también y todos podremos reunirnos contigo y Timothée en el infierno" me miró "Como cuándo teníamos 15 años"
"Ninguno de ustedes irá al infierno Blair" la miré "Mucho menos tú"
"Tú no sabes eso"
"De hecho si, lo sé" ví a Ginny salir de la pastelería y me puse de pie "Sé fuerte, mejores días están viniendo"

Me di media vuelta para irme pero ella sujetó mi mano, la miré otra vez y una sonrisa estaba en su rostro cubierto de lágrimas.

"Te extrañé Sel, todos lo hicimos. Incluso Tom"
"Te quiero Blair" me acerqué y besé su frente "Nos veremos pronto. Cuándo esto termine"

Me acerqué a Ginny y tomé su mano. Dejandola ir en cuánto llegamos a La Madriguera y ella corrió dentro de su casa.

"¡Selly!" gritó Timmy desde la ventana del cuarto de los gemelos, quienes ya no vivían ahí "¡Ven a jugar verdad o reto conmigo, Mione y Ron!"

Lo miré con una sonrisa y asentí. Mañana iríamos por Harry, pero al menos tendría una última noche de normalidad.