El soltero codiciado

El humilde trabajador

Antes de odiar al tercero en discordia, déjenme decirles que todos tienen un motivo para actuar y tendrán su redención.

Con eso aclarado, que disfruten.

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*Jueves*

Bárbara lanzó una carcajada alta cuando abrió los ojos y se encontró la escena del rostro de Kyle con restos de un rollito de sushi en la mejilla. Broflovski suspiró, tomando una servilleta de la mesa para limpiarse y mirar de mala manera a la joven rubia.

—No es divertido — Dice él —Has desperdiciado un sushi que yo pagaré.

—Ay, vamos. ¿De verdad no lo es?

—Estaba siéndolo hasta que decidiste cambiar el juego

—Es mejor cuando ambos cerramos los ojos — Le guiñó el ojo —Así, no sabemos qué tomamos y qué comemos.

—Si tú lo dices.

Kyle terminó por limpiarse el resto de la comida de la mejilla y tomó el sushi caído con su palillo. Bebe sonrió suavemente e hizo lo mismo desde su plato.

Habían quedado en reunirse e ir a comer a uno de los tantos restaurantes que la ciudad ofrecía, en esta ocasión, gana uno japonés, pidiendo dos platillos de sushi surtido. Lo que diferenciaba ese lugar del resto, es que las posibilidades de sabor eran enormes.

A Bebe entonces se le ocurrió la idea de jugar a las adivinanzas, uno de los dos se cubriría los ojos y adivinaría el rollo que el otro le daría a comer. Era divertido, no sabían qué rollo tomarían y comerían, el ambiente se llenaría de incertidumbre.

—Va de nuevo — Comentó Bebe

—No, ya no — Respondió Kyle con cierto malhumor —Sólo haces que termine ensuciándome.

—Oh, vamos.

—No, es más...

Kyle rápidamente tomó uno de los rollos del plato de Bebe, quién al notar cuál era el robado, no tardó en quejarse.

—¡Ese es mi favorito! — Reclamó tratando de recuperarlo.

—Ahora es mío — Kyle sonrió de lado cubriendo el rollo con sus propios palillos

—¡Ky!

El resto de comensales no mostraron molestia o inconformidad, después de todo, una dulce pareja de tórtolos enamorados se encontraban jugando, y si ellos eran felices, a los demás no les importaba el ruido.

—Te mereces eso y más por hacerme pasar la humillación de que los demás supieran de la boda.

Bebe dejó de pelear cuando Kyle comenta acerca de la situación de la boda. Estaba hablando con Wendy por teléfono mientras se reunía con los cuatro chicos restantes; Testaburger le gritó y Bebe, molesta porque su mejor amiga sólo se quejaba de lo mucho que le enfadaba que su ex novio estuviera metido en esa situación pero no se dignaba a hablar con él y arreglar las cosas, arremetió contra ella.

No sé había percatado de su error hasta que el señor de los conejillos de indias se burló con un bufido.

Ella creía que todos se burlarían no solo de la situación, si no, de Kyle y lo mala de su agencia, pero contrario a sus creencias, los cuatro accedieron porque "el ramo sólo le cae a las chicas".

Claro que sí.

—Fue un error — Dijo ella cabizbaja —Lo voy a pagar incluso después de mi muerte.