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Otro mundo y como siempre estaba acostado en una cama desconocida, no sabía con quien probaría ahora, pero el olor lo delataba un poco, había un poco de frio pero no se comparaba con el frio de Escandinavia, se sentía calientito en aquel lugar. No solo era la cobija de lana, la habitación en si era muy cálida, y la persona que estaba en sus espaldas abrazándolo de la cintura era aun más cálido. 

- buenos días - beso su cuello, de alguna manera se sentía diferente, como si algo cambiara dentro de él. 

- buenos días kookie- beso a Jungkook, el olor de Jungkook era más intenso que antes, podía sentir el olor con claridad.

-te ves hermoso - sonrió - ¿Cómo es que tengo al esposo más hermoso del mundo?  

- tuviste suerte - eso sonó como a Jin pero no sabía que decir en esos momentos. 

- claro que la tuve - acaricio suavemente sus mejillas - si quieres quédate un poco más en la cama yo iré a preparar el desayuno y  a alistar a los niños. 

El peli negro se levanto de la cama, se puso una playera que encontró en el suelo y salió de la habitación, era difícil pensar que en casi todas las dimensiones tenía hijos cuando realmete no le gustaría tenerlos, hasta ahora ninguno de sus "hijos" lo habían convencido de tener bebés, sus hijos los macabros le quitaron completamente las ganas, luego con Yoongi le dio cierta ternura al ver al chico tan ilusionado pero aún así no era un sentimiento propio por el bebé solo por Yoongi y su felicidad, con los hijos de Tae no sintió nada a lo mejor por la chica de nombre extraño sintió compasión pero nada más. Así era él, no le gustaba estar atado a algo.

De pronto escucho como esos niños comenzaban a gritar y prender la televisión, cielos gritaban muy fuerte. Se levanto con pereza ya l abrir la puerta se encontró con la casa hecha un desastre, juguetes por todos lados, el piso estaba pegajoso, la televisión a todo volumen con las caricaturas puestas y lo mas notable, niños corriendo por toda la casa gritando. Se acababa de levantar y ya le dolía la cabeza, Jungkook estaba en la cocina preparando unos huevos con tocino, quitando el desastre y los escandalosos mocosos tenía una gran vista con el alfa recién levantado, sus cabellos estaban revueltos, solo llevaba la playera así que se veían sus trabajadas piernas y unos brazos igual de trabajados, las fantasías llegaron a su mente sacándole una sonrisa.

Por alguna extraña razón sintió que gruño un poco y Jungkook volteo con una traviesa sonrisa

- veo que amaneciste con la mente muy alborotada - se acerco para darle una sonora nalgada - pero será después- le susurro en el oído.

- niños ya siéntense que tienen que ir a la escuela y yo a trabajar - los mocosos dejaron de gritar para ir a la gran mesa, se quedo con la boca abierta, eran seis mocosos. 

-papi yo quiero una carita feliz en mi comida - dijo una niña de unos cinco años. 

- igual yo- gritaron dos niños idénticos de cuatro años

-yo quiero una malteada de chocolate - dijo el niño más grande, aproximadamente seis años. 

- yo do quiedo buevo, quedo chocoate - cielos ese niño estaba sentado a lado de otro más pequeño que ni siquiera hablaba. 

- pregúntenle a su madre - Namjoon se sentó en la mesa aceptando el café de su esposo, todos los niños lo vieron suplicantes. 

- el chocolate los pondrá más hiperactivos, ni le piensen - todos pusieron una cara triste. 

-ya lo escucharon así que coman lo que les doy o llegaran tarde - devoraron la comida, como animales salvajes, bueno se imaginaba que eran mitad lobos. Cuando todos acabaron los adultos a penas iban a tocar su desayuno. 

Nihilista- NamjoonxbtsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora