Nihilista- Namjoonxbts

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Le dolía todo su cuerpo, estar viajando por tantas dimensiones le cobraba factura pero al menos ya solo le faltaban dos chicos que visitar. La sensación de estar en una cama cómoda lo relajaba pero en serio que le dolía mucho el cuerpo, una mano acariciaba su cintura mientras le daba pequeños besos por toda la cara hasta que abrió los ojos.

- hola mi amor - beso sus labios - ¿Sucede algo?

- no es solo que me me duele el cuerpo - Jimin sonrió.

- es normal, siempre te sucede- acaricio su mejilla y se levantó de la cama.

Solo traía puesto unos boxers exponiendo su trabajado cuerpo, debía de admitir que le gustaba mucho el cuerpo de Jimin, lo vio ir al gran closet del cuarto para tomar un traje.

- Jimin sería loco si te digo que no recuerdo nada- el vampiro se acercó al moreno.

Acaricio su cabello y tocó su frente, tenía un poco de fiebre.

- te ha pasado otras veces, siempre recuerdas unos días después todo, pero te explicaré lo que harás hoy.

Asintió, fue fácil sacar información, pero lo extraño era por qué no recordaba cosas a menudo en ese mundo.

- yo iré a trabajar a la universidad y llegaré a las seis para cenar contigo, te tienes que levantar y preparar el desayuno para nuestro pequeño. Se llama SeokWoon y tiene diez años.

Asintió.

- el va solo a la escuela así que no te preocupes, llega a las cuatro de la escuela pero hoy tiene práctica en su club de música. Mientras él está en la escuela tú trabajas desde casa en una revista de filosofía.

Era el primer mundo donde trabajaba aunque tuviera hijos, eso lo hacía feliz y hablaba bien de Jimin que no le importaba si trabajaba.

- entiendo- Jimin lo beso en los labios, fue un beso lento pero poco a poco se volvió más profundo, acostó a Namjoon en la cama para seguir besándolo pero alguien tocó la puerta.

Los dos se separaron bruscamente, en la puerta estaba un niño de piel blanquecina, muy delgado, con un cabello café claro y unos ojos pequeños, era realmente tierno.

-¿Qué pasó hijo?- Jimin lamió sus labios.

- es que ya es tarde y quería preguntar si me hago yo el desayuno o mi mami lo hará.

Namjoon se quedó callado y al ver los ojos del pequeño que despedían tristeza sintió que su corazón le dolía.

- yo te lo hago- se levantó, afortunadamente él si tenía puesta la pijama.

El departamento era el mismo que tenía Jimin en su mundo o pasado, al parecer lo había comprado así que fue fácil saber dónde estaba cada habitación.
Entró a la cocina, en el refrigerador había muchas cosas y decido prepararle un huevo, era lo poco que podía hacer. Mientras lo hacía el niño se sentó en enfrente de la mesa para tomar una leche con chocolate, era muy tranquilo y no hablaba mucho.

Jimin salió cuando le puso el plato al niño, también había preparado para ellos dos.

- ¿Te gusta lo que te preparo mami?- dijo su padre y el asintió. - siempre te gusta la comida que prepara

- porque bla hacer especialmente para mí.

Comieron con tranquilidad hasta que la hora de irse llegó, lo bueno era que en las escuelas daban de comer o estaría en problemas preparándole un almuerzo decente.

- nos vemos-se despidió Seok con un beso en la mejilla.

- cuídate mucho- acaricio su cabeza.