El dragón del escudo

Capítulo 7: Un tiempo para celebrar

Descargo de responsabilidad: no soy dueño de la serie Yakuza ni de Rising of the Shield Hero

Un tiempo para celebrar

Kiryu se reclinó contra los muros del castillo, con los brazos cruzados sobre el pecho. No se molestó en intentar entrar con Naofumi y Raphtalia después de que los dos regresaron para obtener su recompensa obligatoria del Rey. Kiryu pensó que deberían haberse ido sin él, pero Naofumi insistió en conseguir el dinero. Esperaba que el Rey se separara al menos de lo mínimo, pero lo dudaba mucho después de todo lo que sucedió la noche anterior.

Las cosas ciertamente se pusieron locas anoche. Podría haberse vuelto más loco si no fuera por las personas de negro que intervinieron. Kiryu entrecerró los ojos pensativo, recordando a los hombres enmascarados que habían obligado al rey a detenerse. Recuerdo que Harken mencionó que la Reina tiene todo el poder. Ella es la única que puedo imaginar capaz de hacer que se detenga. Aún así, la pregunta es ¿por qué?

Los pensamientos de Kiryu fueron empujados a un lado cuando escuchó la puerta principal abrirse. Se apartó de la pared, viendo salir a Naofumi y Raphtalia, la primera con una mueca de enojo.

"Oye." Kiryu gritó, acercándose a ellos. "¿Como le fue?"

"Tan bien como era de esperar," se burló Naofumi, caminando hacia adelante para distanciarse del castillo. "Casi no me pagan, esos bastardos ..."

"Me sorprende que lo hicieras." Kiryu admitió.

"Aunque no parecen estar completamente de nuestro lado, los Héroes de la Espada y el Arco defendieron al Maestro Naofumi". Raphtalia explicó.

"¿Estaban convencidos anoche?"

"No. Sólo estaban satisfaciendo sus propios egos. Todavía son un par de idiotas". Naofumi lo despidió con irritación.

"¡Kiryu-san!"

Los tres se detuvieron, volviendo su atención para ver a Itsuki y Ren caminando hacia ellos. Kiryu le dio a Naofumi una mirada antes de caminar lentamente hacia atrás, cruzando los brazos sobre su pecho.

"Oye. ¿Necesitas algo?" Preguntó Kiryu.

"¡Quiero una explicación, al menos! ¡Dijiste que estabas demasiado ocupado protegiendo tu aldea para unirte a mi grupo! Entonces, ¿por qué te uniste a ese sinvergüenza?" Preguntó Itsuki, señalando con el dedo a Kiryu.

"No estoy en el partido de Naofumi. Él salvó mi aldea y yo estaba pagando esa deuda". Kiryu explicó fácilmente, entrecerrando los ojos. "Pero después de todo eso, ¿cómo puedes seguir llamándolo sinvergüenza?"

"¿Qué quieres decir? Independientemente de la parcialidad del Rey, ¡él sigue siendo un criminal conocido!" Itsuki resopló indignado.

"¿Quieres decir que incluso después de lo que pasó durante el duelo y después, todavía piensas que Naofumi hizo esas cosas?" Preguntó Kiryu, su voz bajó mientras sentía irritación.

"A pesar de sus acciones la noche anterior, se podría argumentar que la Princesa simplemente todavía odia a Naofumi por lo que hizo y actuó emocionalmente". Ren argumentó, siendo esta la primera vez que Kiryu lo escuchó hablar directamente. "Tan injustos como fueron los eventos de anoche, eso no significa que Naofumi haya sido absuelto de sus crímenes."

Kiryu descruzó los brazos y apretó los puños a los lados. "Ustedes dos realmente son solo un par de niños con la cabeza en las nubes".

Ren e Itsuki se estremecieron ante sus palabras, sus expresiones cambiaron a sorpresa antes que irritación.