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Ahí estaba, el más inteligente de la clase. Camina entre los pasillos de la escuela, con libros entre sus brazos se dirige a su próxima clase. A pesar de que le iba bien en la escuela, ha tenido que afrontar grandes obstáculos y contratiempos; Krel Tarron, el hijo de una mujer que tuvo una de las más complicadas batallas que una joven podía tener, tuvo a su único hijo cuando apenas tenía dieciocho años de edad. Marie se las arregló para salir adelante junto a su pequeño, quien a sus seis años comenzó a mostrar signos de ese mundo niño dotado de gran inteligencia.

-- Tienen una hora para resolver sus exámenes-- Dijo una profesora--

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-- Tienen una hora para resolver sus exámenes-- Dijo una profesora-- ... Empiecen ahora

-- ...-- El chico comenzó a escribir.

No pasó ni media hora, cuando el chico ya estaba entregando el examen. Al ser el primero en terminarlo se le dio permiso de ir al descanso. Tomó sus cosas y se fue del salón, fue directo a la biblioteca de la escuela y se sentó para comenzar a leer sin que nadie lo molestara, pero ese día fue diferente a los anteriores. Se escucharon risas en un tono bajo junto a unos susurros. Separó su vista del libro y miró hacia donde estaban esos extraños sonidos, eran cuatro chicos -un rostro era conocido de él- Los jóvenes estaban viendo algo en una laptop, no pudo ver lo que era debido a que esta estaba dándole la espalda.

-- Mira eso-- Dijo una joven de estatura un poco baja, pelo rosa y piel blanca. Tenia una vestimenta algo diferente a lo que el chico estaba acostumbrado a ver en chicas. Tenia una sudadera color azul de hombre y unos shorts naranjas que le llegaban a las rodillas.

-- Que tonto-- Dijo otro chico de pelo verde, este era un poco más alto y tenía más masa corporal que sus compañeros

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-- Que tonto-- Dijo otro chico de pelo verde, este era un poco más alto y tenía más masa corporal que sus compañeros.

-- Jajaja-- Una joven albina trataba de no reír tan alto, poseía una blusa roja y unas medias negras acompañadas de botas del mismo color

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-- Jajaja-- Una joven albina trataba de no reír tan alto, poseía una blusa roja y unas medias negras acompañadas de botas del mismo color.

-- Shhh, no hagan mucho ruido

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-- Shhh, no hagan mucho ruido. Nos sacarán de la biblioteca-- Dijo el cuarto chico, quien tenía el pelo negro, ojos verdes y su vestimenta era de un estilo "emo". Una playera roja, sudadera negra, jeans oscuros y unas botas negras.

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-- ...-- El moreno seguía mirándolos, pero con un libro en su rostro para evitar que los chicos se enteraran de que estaban siendo vigilados.

-- Amo estos vídeos, si que me suben el ánimo-- Dijo la joven de pelo rosa.

Cuando pasaron unos segundos, los chicos soltaron unas risas haciendo que la bibliotecaria les llamara la atención.

-- La biblioteca es para leer y hacer tareas, no para ver vídeos de risa-- Cerró la laptop mientras los miraba con seriedad.

-- Lo sentimos, estábamos haciendo tarea, pero una cosa llevó a otra y terminamos ahí-- La de menor altura Sonrió.

-- ...-- Miró a todos los chicos, luego miró a la albina y le llamó la atención-- Jovencita, sabe que están prohibidas las perforaciones, quítese ese arete del labio y se lo pone fuera del plantel

-- Lo siento-- Se lo quitó y lo guardó.

-- Ahora vayan a su descanso y sólo entren cuando quieran hacer tarea o leer

Todos asintieron y se levantaron de su asiento para después irse, el moreno siguió leyendo. Al paso de las horas, por fin sonó la campana que anunciaba el fin de las clases. Con mochila en la espalda, el moreno caminaba por los pasillos y bajaba las escaleras, en eso se topó nuevamente con los cuatro chicos.

-- Nos vemos después chica, mañana habrá selección de equipos para el torneo de fútbol. Espero puedas unirte con nosotros-- Dijo el ojiverde mientras miraba a la albina.

-- Claro, ahí estaré-- Sonrió.

-- Gracias, no me gustaría hacer de mal tercio con estos dos-- Susurró.

-- ¡Eh! Te hemos escuchado, no somos novios-- Dijo la pelirosa.

-- Solo somos amigos, no entiendo por qué nos dicen eso-- Aclaró el peliverde.

-- Jajaja, nos vemos chicos-- La joven tomó sus cosas y caminó a la salida.

Los tres chicos iban a ir antes a la dirección, pero en eso se cruzaron con Krel, el azabache lo miró y en ese momento sus miradas chocaron por tan sólo unos segundos. El mayor se quedó sin saber lo que había pasado en ese momento, simplemente volteó y miró al chico que los había pasado, este no pudo ver que el mayor lo miraba ya que estaba dándoles la espalda y después de eso se fue del plantel.

.-- 𝙢 𝙞 𝙚 𝙙 𝙤  𝙖  𝙥 𝙚 𝙧 𝙙 𝙚 𝙧 𝙩 𝙚 ⃨⁙⃟🌹.-- Donde viven las historias. Descúbrelo ahora