El gobierno nacional se niega a lanzar el nuevo billete de $5000 y sale a sub contratar la impresión de los papeles de moneda Argentina para hacer frente a la demanda de fin de año.
¿QUÉ SUCEDE CON ESTO? ¿HABRÁ MÁS INFLACIÓN?
Es verdad que la pandemia cambió el hábito de los países con respecto al dinero y la creciente demanda por el uso de efectivo, pero esto no es excusa, cualquier economía puede hacerle frente a un desequilibrio provocado por más emisión del presupuesto acordado. Sin embargo, este no es el caso de Argentina, que ya tenía una crisis gracias a estúpidas políticas económicas y monetarias.
Siempre que hubo emisión monetaria desmedida significó inflación futura, no se olviden de eso.
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El Banco Central ya perdió 1,000 millones de dólares de reservas en el mes.
Las ventas no superan los 200 millones de dólares.
Las reservas continúan en un ritmo marcado por la caída.
Y la principal preocupación que comentó el presidente del BCRA, Miguel Pesce, es que a pesar del fuerte cepo, les resulta imposible acumular divisas extranjeras.
Detrás del desbalance que están sufriendo, se encuentran 2 fenómenos simultáneos: los exportadores no quieren liquidar su producción al actual valor del dólar oficial y del otro lado, los importadores quieren entrar todo lo posible con este tipo de cambio.
Y para colmo, al BCRA no le quedará otra que agarrar la "maquinita de dinero" y emitir no menos de $300.000 millones adicionales, lo que indudablemente va a generar mas presión sobre el mercado cambiario y los precios. Además, el repunte de la inflación a 3,8% en octubre encendió las alarmas y se espera que continúe dentro de valores altos.
