It's you|| Mati Álvarez|| Exatlon

Cinco

Camine por la playa admirando el lugar, agradecía que tuvieramos competencia en la noche pues así podría estar aquí más tranquila.

Sentí un escalofrío cuando una brisa pego, me acerque a la orilla de la playa sintiendo el agua envolver mis pies.

—No te vayas a enfermar.

—¡Deja de asustarme así!

—En mi defensa, me la debías—señaló Mati colocándose a mi lado—¿Lista para la competencia de hoy?

—No me hablas en días ¿Y me preguntas eso?—reclame dándole una corta mirada a lo que esta se sonrojo.

—Mi error... ¿Quieres que vayamos a caminar?

—Debo pensarlo porque... ¡Mati!

Ambas reímos antes de comenzar a caminar por la playa, me acomode en la espalda de la heptatleta observando el lugar.

—¿Era necesario hacer eso?—pregunté sintiendo sus manos acomodar mis piernas.

—Pues... Era la única forma que aceptaras caminar conmigo.

Reí una última vez para bajar de su espalda, camine a su lado observando en atardecer que se formaba.

—¿Sabes? Me caes bien—susurre observando a la rubia, sonreí levemente al escuchar su risa.

—¿Tuviste que esperar casi un mes de amistad para decirme esto?

—Tal vez...

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Me acerque totalmente sorprendida hacia mi hermano.

Ernesto había sido eliminado por Keno. Mi hermano abrió sus brazos para recibirme en un cálido abrazo.

—Cabeza en alto ¿De acuerdo? Desde afuera te estaré apoyando.

—No me dejes aquí sola.

—Tienes a Aristeo... Estoy seguro de que ambos lo harán excelente—aseguro dejando un beso en mi cabeza.

Sentía impotencia ante la estrategia de Cassandra, ella se quedó en la tercera temporada y aún no sienta cabeza de que somos más compañeros de otras temporadas y no sólo de la tercera.

Me abrace de Ernesto logrando divisar al equipo llorar, era la primera eliminación donde los veía llorar.

Nos pusieron en nuestros lugares mientras Rosique despedía a Ernesto no sin antes decirle que podría ir a la fortaleza a despedirse de Aristeo.

—¿_______ puede ir?—pregunto limpiando sus lágrimas, Rosique se limitó a negar con una pequeña mueca—Ya deja de mentirte, te gusta Mati.

Rodé mis ojos dejando un último golpe en su hombro causando nuestra risa, suspiré limpiando mis lágrimas observando como mi hermano se iba.

—¡Todos podemos volar como Águilas!—grite recordando las palabras de mi hermano al decir que esta porra era iconica de la primera temporada, el equipo me siguió hasta que perdimos de vista al niño maravilla.

Todo el equipo me abrazo hasta que nos indicaron que ya debíamos ir al campamento, la mayoría seguía llorando y me incluía, todos llegamos a hablar sobre lo que había pasado pero recordamos los buenos momentos ya que al fin y al cabo es lo que mejor te llevas.

Antes de ir a acostarnos avise que iría un rato a la playa, al llegar me tumbe en la arena para mirar el cielo mientras trataba de analizar todo lo que había pasado.

Mi hermano se había ido.

—¿Están bien? Ernesto se fue a despedir de Aristeo, a todos nos impresionó—gire para observar a Mati llegar, me levante para mirarla y dudar mi acción por unos segundos, me atreví a acercarme para abrazarla mientras ella me correspondía.

—Cassandra fue la que dio de opción esa estrategia— murmure escondiendo mi cabeza en su cuello mientras sentía que me apretaba más a ella.

—Estoy segura que Cass no lo hizo con ese propósito— murmuró acariciando mi espalda, suspiré separandome de la mujer para sentarme en la arena.

—No se que haré sin mi hermano.

—Aris sigue aquí... Ambos lo darán todo por Ernesto—animo envolviendome en sus brazos nuevamente.

Sin darnos cuenta ya había oscurecido, me levante con ayuda de Mati para ambas tomar un camino diferente hasta que su voz me interrumpió.

—¡No te dije!— grito mientras regresaba corriendo—Hoy te ves muy linda.

—Estoy igual que otros días, Mati

—Todos los días te ves linda—excuso dejando un beso en mi mejilla para después irse corriendo.

Sonreí claramente sonrojada encaminandome al campamento.

Llegué directamente a dormir pues había sido un día bastante cansado y muy emotivo. Aún en madrugada salí para observar como amanecía, pegue un brinco al ver como Javi salía de la cabaña.

—Se que no te gusta hablar de eso pero...

—No me gusta Mati—respondí ya cansada del mismo tema.

—¿Me vas a negar que es linda?

—Es muy linda, si—afirme acomodando mi abrigo sin dejar de observar el lugar.

—Te conozco desde hace tres años... Solo te diré que ambas se ven bien juntas. Su amistad es linda.

—Lo mismo dijo Ana.

Le di una última mirada antes de ver cómo se perdía entre la selva, me levante de mi lugar para caminar hacia la playa. Una gran sonrisa se formó en mi rostro al ver a Mati en la playa.

Antes de llegar vi que esta estaba acompañada platicando con Ana, Zudikey y Carmelita, no es que fuera chismosa pero no iba a interrumpir su platica.

Estaba dispuesta a irme hasta escuchar algo que llamó mi atención.

—Por dios, Matilde, ¿Debemos darte un golpe para que entiendas?—regaño Ana algo frustrada.

—No, es solo que con Irene es algo diferente— explico pasando una mano por su cabello, ya veía el rumbo de esta platica—Es difícil soltarla, ella puede decirme una grosería y yo estaría feliz, con _______ apenas nos estamos conociendo y no sé...

—¡Mati, Irene te manipula a su antojo, eres mi amiga y te apoyo en todo pero así no!— dijo Ana antes de irse, se giro para volver a decirle algo a Mati hasta que me vio ahí haciendo que las tres mujeres voltearan a verme.

—_________, ¿Que escuchaste?

Trate de sonreír observando a las mujeres ahí.

—Lo suficiente, creo...