It's you|| Mati Álvarez|| Exatlon

Once

Nos despertamos con el peor animo del mundo.

No me sorprendería si perdemos las próximas competencias, me acosté con Evelyn y Val las cuales se estaban despertando.

—No saben cuanto rogué que fuera un sueño—murmure haciendo que mis amigas a sintieran sonriendo levemente.

Me levante para saludar a mis demás compañeros antes de tomar mi suéter e ir a la playa encontrándome como siempre a Mati sentada mientras se peinaba.

Camine para sentarme a su lado y abrazarla, sentí sus labios dejar un cálido beso en mi cabeza lo que me hizo relajarme un poco, continuó peinandose para después colocarse detrás de mí.

—Ven acá—dijo antes de comenzar a peinarme.

—¿Vamos a tener el mismo peinado?— dije haciéndola reír.

—¿Tu que crees, tonta?—pregunto y nuevamente reímos, al final si me hizo el mismo peinado que ella para luego sentarse a mi lado—Linda, como siempre—murmuró antes de darme un pequeño beso haciendome sonreír.

Comenzamos a hablar sobre lo que había estado pasando en nuestros equipos, a lo que ella me contó su equipo nuevamente discutió por Caro la cual no ha sabido acoplarse.

—Y Aris sacó buenos argumentos, mis respetos para mi futuro cuñado—dijo para luego tapar su boca claramente sonrojada, no pude evitar soltar una carcajada antes de abrazarla.

—¿Eres Matilde o un tómate?—pregunté ganandome un empujón por parte de esta.

—Te daré 5 segundos de ventaja—dijo ayudando a levantarme, suspiré antes de salir corriendo tratando de no reír pero era imposible, cuando mire hacia atrás ya tenía a pocos metros a Mati cerca de mi.

Sentí unos brazos jalarme para después cargarme, no podía evitar reír al igual que ella, mi risa fue interrumpida al sentir como caía al mar.

Como pude salí de ahí solo para observar a Mati tirada en la arena muerta de risa, nade para salir y tirarme encima de ella ambas riendo, coloco su mano en mi mejilla para darme un cálido beso y después decirme algo que me dejó sin aliento.

—Soy muy feliz contigo.

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Al parecer a Mati le gustó que estemos peinadas iguales, camine a mi lugar para escuchar el silbato y salir corriendo tratando de aguantar el paso de Zudikey.

Al llegar a la zona de tiros trataba de concentrarme en la voz de mi equipo pero me era imposible.

—¡Vas bien, dale!—grito Mati, no sabia si era para mi o para su compañera, alce mis brazos cuando vi el aro entrar, al pasar a lado de Mati rozamos nuestras manos para ambas sonreír.

Después de varias horas llevábamos una buena ventaja sobre los rojos, camine con Valery mientras le daba algunos consejos sobre el tiro a lo que ella asintió tratando de memorizar todo.

—¿Debo ponerme celosa?—dijo Mati metiéndose en medio de nosotras.

—Toda tuya—dijo Valery alzando los brazos mientras reía.

—¿Me permites? Gracias—dije mientras le quitaba su banda para colocarmela.

—Claro, con confianza—dijo empujandome levemente, ambas reímos antes de que me abrazara rápidamente para ir a colocarse en su lugar.