Mi dulce obsesión (Kookmin) ✔

Un cuento que aún se escribe (extra)•

⚠️(Último extra)⚠️

Jungkook & Jimin

Tener de nuevo a mi mochi en su faceta de embarazado era genial, bueno a excepto cuando le entraban esos pequeños ataques de llanto o cuando se enojaba conmigo por cualquier cosa porque cabe de recalcar que por muy enojado que estuviera a los niños siempre los iba a tratar muy bien y a mi no me importaba que se desquitara conmigo, por que los beneficios valían cada unos de los gritos y regañadas que me daba.

Ya saben lo precioso y jodidamente sensual que es mi esposo, pues ahora embarazado su trasero y caderas eran más grandes además que la mayoría de veces que me veía haciendo ejercicio o sin camisa sabia muy bien que terminaríamos teniendo candentes sesiones de sexo, aunque de manera cuidadosa para no lastimar al bebé quien por suerte sería un niño, no saben lo feliz que me sentí al enterarme porque ahora ya no solo tenía a mi Sehunnie para ayudarme a cuidar de sus hermanas si no también tendría a otro lindo varoncito a quien educaria bien para proteger a sus hermanas de chiquillos tontos como Kyung quien a pesar ser hijo de nuestros amigos nada le quitaba que quería conquistar a mi princesa y como padre dragón no se lo permitiría.

Hoy me había levantado temprano para alistar a los niños para ir a la escuela y que tuvieran listo para cuando Jin pasara a buscarlos ya que esta semana le tocaba a los Kim llevar a los niños y aunque al principio no quería mucho decidí aceptar pues no quería tener una guerra con Jimin la cuál sabía que él terminaría ganando.

Minutos más tarde me había despedido de mis angelitos y me encontraba poniendo el desayuno en la bandeja para llevárselo a mi Ángel.

....

Levantarse y no sentir a tu amado esposo en la cama abrazándome no es para nada agradable y mucho menos ahora que necesito sentirme muy querido y amado por Jungkook ya que realmente con este nuevo embarazo he subido mucho más de peso y eso me tiene algo desmotivado ya que no me siento tan bonito y sexi como antes y las inseguridades se hacían presentes en mi, pero también era consciente que todo esto fuera así más ahora que estoy en las última semanas.

Además que no podía controlar mi estados de ánimo y por más que intentara no molestarme algunas veces con Jungkook no podía evitarlo y tenía mucho miedo de que él se alejara de mi a causa de mi cambio de humor.

Estaba a punto de levantarme de la cama cuando la puerta se abrió y vi como Kookie entraba con una gran bandeja de comida y un pequeño ramo de tulipanes morados mis favoritos por cierto.

Cosa que me hizo sonreír como un tonto y darme cuenta que debía ser fuerte, Jungkook ya me había dicho un sinfín de veces que yo era y sería al único que amaba.

—¿Cómo amaneció el rey de la casa y mi pequeño príncipe? —Me preguntó para luego poner la bandeja sobre la mesita cerca de la cama y meterse a la cama conmigo.

—Bueno días mi amor al parecer estoy bien y Jeong-in aún sigue durmiendo — respondí mientras tocaba mi gran panza.

—Sabes que cualquier cosa lo más mínimo que sientas debes decírmelo — comentó — para luego tomar mi cara entre sus manos y comenzar un beso, yo al principio no quería ya que aún estaba recién levantado, pero al parecer a él no le importo así que me deje llevar.

El beso pasó de ser lento a ser uno bastante apasionado acompañado de deliciosas caricias.

—Joder mi Ángel no sabes como me pone ver como tu trasero y caderas son más grandes ya que te amo delgado, pero el que ahora tengas más curvas lo amo mucho más —decía mientras besaba mi cuello y apretaba con sus grandes manos mi trasero haciéndome gemir de placer.