Teatro

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—¡Basta!, ¿qué crees que haces? —gritó la mujer frente a él, se trataba de YoungSun.

—¡Quítate! —ordenó histérico.

—No lo vas a tocar.

El pelinegro se detuvo, YoungSun dirigió su vista a HongJoong, le tomó del brazo, y se lo llevó.

—¿Cómo estás? —preguntó buscando su mirada.

—No me siento bien, quiero irme a casa.

—HongJoong todos preguntan por ti, están extrañados porque no te ven junto a SeongHwa. Creo que lo mejor será que regreses.

—A mi no me importa si está solo, o acompañado, me engañaron. Los odio a todos —su voz y ojos llenos de amargura sorprendieron a YoungSun— de seguro usted también lo sabía.

—Algo sospeché, pero déjame decirte algo, no seas egoísta, tú no eres él único que sufre. Así que regresa y no hagas las cosas más grandes.

Decidió no decir nada más, le pareció inútil.

(...)

—¿Para que regresaste? Dijimos que te sentiste mal.

—Perdón —una risa llena de amargura se dibujó en sus labio.

—Quedamos en ridículo —SeongHwa le miró bien, detrás de ese rostro frío, notó lo mucho que había estado llorando, sintió la enorme necesidad de abrazarlo y no permitir que derramara más lágrimas, pero sabía que eso no era posible.

La fiesta se dió por terminada y todo el mundo se marchó dejando solo a los familiares más íntimos.

La madre de SeongHwa hablaba con YoungSun y su padre con HimChan, parecían de lo más normal.

—HongJoong iremos a la casa a buscar tus cosas, ya después te irás con tu esposo —habló su tío y él sólo asintió sin siquiera mirarle.

Tal cómo lo dijo así pasó, en menos de una hora estaba frente a la gran estructura, una mansión moderna y gigante, no pudo detallarla bien debido a que era de noche, pero sin dudas era majestuosa.

Cerró los ojos deseando que al abrirlos las cosas fueran diferentes, pero eso no pasó.

Al llegar se encontró con todos reunidos en la sala, jamás se sintió más avergonzado, quería esconderse bajo la tierra y no salir jamás.

La señora Park al verle subió las escaleras, y SeongHwa desvío la mirada incómodo.

Entonces HyukJae fue quien habló.

—Bienvenido... disculpa, ¿cómo es que te llamas?

—HongJoong —contestó secamente.

—Bueno HongJoong, ya eres parte de la familia espero...

—Papá ya deja de fingir —intervino Seonghwa— él sabe la verdad, el porque de este matrimonio y todo, no es necesario el teatro.

Hyukjae suspiró, y levantó sus manos en señal de rendición.

—Créeme que tomaste la mejor desición, la constructora Kim no podría estar en mejores manos, si no quieres seguir casado con Hwa pueden divorciarse, no hay problema.

—No quiero parecer grosero, pero estoy muy cansado y solo quiero dormir.

Su rostro sin expresión alguna preocupó a Seonghwa, sus ojos estaban hinchados, la palidez de su piel era demasiado notoria, insana.

La muchacha del servicio le guío a lo que sería su habitación.

La abrieron y al entrar se sorprendió por lo bonita y grande que era. Le gustó la gran ventana que tenía, le hacía recordar a la de su antigua habitación.

Jamás hubiese imaginado que estaría alguna vez en esa casa, se sentía tan incómodo y enfermo.

—Papá, mamá, Yeo... —perdonenme —dijo derramando amargas lágrimas, mientras abrazaba con fuerza la fotografía de sus padres.

(...)

A la mañana siguiente se despertó muy temprano, no quería bajar ni siquiera a desayunar, se sentía cansado, sin el más mínimo rastro de energía, además el dolor de cabeza era insoportable.

Estando en su cuarto escuchó gritos y personas discutiendo.

Era él.

Bajó las escaleras lo más rápido que pudo, encontrandose con YeoSang, quién al verle al pie de la escalera corrió hacia él y lo siguiente que sintió fue el impacto en su mejilla.

—¡Eres un maldito traidor!, ¡me quitaste a mi novio, SeongHwa me dejó para casarte contigo!

HongJoong estaba en completo schok por su reacción.

Jamás le había visto así, tan lleno de ira.

—¡Basta!, las cosas no son como te las imaginas. Esto es un negocio, además de igual forma nuestra relación no tenía sentido porque yo no te amo, tú lo sabías.

Seonghwa muy enojado se interpuso para evitar que intentara de nuevo algo en contra de Hong.

—¿Porque no lo aceptan? Los dos me traicionaron, ya sospechaba que a ti te gustaba mi novio —se dirigió al castaño— pero jamás imaginé que ibas a pagarle para que se revuelque contigo, eres un ofrecido, menos mal que tus padres están muertos porque sino estuviesen terriblemente decepcionados de la basura de hijo que tienen.

Había cruzado la línea.

—¡Cállate!, no sabes nada, no te quité a nadie, nunca quise que esto pasara, perdóname por ser el más estúpido del planeta, el más cobarde, pero con mis padres no te metas

Las lágrimas de nuevo corrían sin cesar por sus mejillas, pero las quito bruscamente.

—Estoy harto de esto, cansado de lidear con gritos, con golpes, si no me crees, no lo hagas.

SeongHwa solo los observaba, callado, queriendo llevarselo lejos de tanto dolor.

—No creas que con tus lloriqueos me vas a convencer, siempre buscas dar lástima, te haces la víctima para tener a todos a tus pies, eres un hipócrita —quiso acercarse de nuevo, pero SeongHwa le detuvo.

—¡Vete!, ¡ya fue suficiente! —exclamó furioso, le tomó del brazo para sacarlo a la fuerza si era necesario.

—¡Sueltame! —gritó, pero el pelinegro no le soltó— ¡que me sueltes te digo! Ya me voy a largar, al fin que no quiero seguir viéndo a este hipócrita.

HongJoong subió las escaleras corriendo en dirección a su cuarto, cerró la puerta y se lanzó a llorar apoyándose en esta, escondiendo su rostro entre sus rodillas.

Ya todo era un desastre, y con lo de YeoSang sentía que colapsaría, intentó levantarse y no pudo, todo le daba vueltas, sentía su corazón latir con mucha fuerza, y un dolor profundo en la parte del pecho, sino estuviese sentado podía asegurar que ya se hubiese desvanecido, se sentía muy mal.

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Senya 💜🌙

𝒀𝒐𝒖'𝒓𝒆 𝒏𝒐𝒕 𝒂𝒍𝒐𝒏𝒆. 𝑰 𝑷𝒓𝒐𝒎𝒊𝒔𝒆 {S͟e͟o͟n͟g͟J͟o͟o͟ng͟} Donde viven las historias. Descúbrelo ahora