Érase una vez...
Una estrella que no brillaba, una que se había deteriorado.
¿Cómo es eso posible?
No se enfoquen en la ciencia, busquen la realidad; esa que te destruye y luego te culpa, esa que te quita hasta las ganas de vivir y te hace pensar que todo es fruto de lo que alguna vez sembraste.Díganme, ¿Alguna vez han sentido que sus vidas dieron un giro de 180 grados?
Uno que sacudió totalmente su centro de gravedad, y a raíz de eso aprendieron que de cada sin sabor queda algo por considerar. Que aunque suene tonto, es como si la vida les dijera: "De la risa al dolor, se puede pasar en un instante".
Somos esclavos del destino, pero nosotros decidimos si serlo de nuestros secretos.Érase una vez...
Una estrella en el firmamento, tan llena de luz que lograba contagiar calidez y esperanza a quien la contemplase.
Una estrella tan esplendorosa que podía regalarle luz a aquella que carecía de brillo.Ahora yo les digo algo...
Existen personas que son magia, que logran hacer del mundo un lugar maravilloso con el simple hecho de existir; y si tienen la dicha de cruzarse con una de ellas, cuídenla como si del tesoro más precioso se tratase.
Cuando se encuentra a una estrella fugaz, una que ilumina aunque sea por un instante el cielo tenebroso, es nuestra obligación amarla y valorarlaUna curita para el alma, un abrazo en la soledad y amor en la tristeza. Eso era él para mí.
Pero con el tiempo, y gracias al destino, a la vida, al azar; esa curita se fue deteriorando, ese abrazo se fue haciendo débil y ese amor se fue apagando, junto con su luz.Al final, en el último recorrido que realicemos, no importa cuánto nos esforcemos... Todos seremos alguna vez: una estrella con poco brillo.
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Una estrella con poco brillo - EN PAUSA
Teen FictionNikolas Hoffman, un prometedor médico cirujano, después de enterarse sobre la muerte de su prima más querida, decide crear una línea de apoyo para personas maltratadas o con problemas que afecten su salud tanto física como psicológica. Lo que no es...