GOODBYE (Min Yoongi x Tn)

2.

Tn caminaba con una sonriente expresión por la calle llena de pozos. Una vez que se sentó en la banca, se quedó pensando en la historia de la noche anterior, por alguna razón, esta en particular le había hecho sentir muy triste. Yoongi siempre le contaba historias, era como una especie de acuerdo entre ellos. Al final de cada encuentro, él debía contarle un relato para que luego ella se fuera a su casa y él desapareciera. 

Ella había llegado a la conclusión que aquellos relatos eran parte de la historia de vida de Yoongi. A veces se lo dejaba muy en claro, como la noche anterior pero en ciertas ocasiones no lo decía, quizás él quería hacerlo parecer como algo simplemente que se inventó en el momento para ella. Sin embargo, Tn podía ver cómo parecía tensarse al contarlo, podía escuchar como su voz se quebraba o tartamudeaba al narrarlo. Ella simplemente sentía cuánto le afectan aquellas historias “para nada personales” , así solía decirle cada vez que el cuento terminaba, en el interior del chico. Tn lograba verlo en los ojos tristes de él. Tal vez, eran esos relatos los que más lo atormentaban. 

Cuando la presencia del chico se hizo presente, pudo notar que aquella media sonrisa, ya no estaba en su rostro. 

-¿Qué te pasó? ¿Por qué tienes esa cara? 

-Estoy bien, no te preocupes. ¿Cómo estás tú? 

-Bien, aunque mi felicidad se me fue cuando vi tu rostro. A ver.. no es que seas la persona más alegre pero tampoco traes una cara larga, al menos no siempre. -le sonrió tratando de subirle el ánimo.-

Y vaya que lo había logrado. El chico soltó una risa sincera mostrando una bella sonrisa para los ojos de la muchacha. Ella sabía que aquellos chistes no le molestaban en absoluto, de hecho, se reía bastante cuando la chica solía hablarle en tono burlón. 

-De verdad, no me ocurre nada, supongo que estoy algo cansado. 

-¿De hacer..? -lo miró con las cejas enarcadas en modo interrogatorio.- 

-Ya te dije que tengo cosas pendientes, debo averiguar cómo hacer para irme de una vez. 

-Cierto, suelo ser muy olvidadiza.

-Si, ya lo habías mencionado. 

-En fin, me gustaría que me cuentes aún más sobre tu mejor amigo. 

-Estaba recordando.. la última vez que peleamos. Ese día, yo estaba muy enojado con él. Recuerdo haber ido hasta su casa con toda la furia y agresividad del mundo, entré a su casa, por supuesto que tenía las llaves, ambos teníamos una copia de las del otro por cualquier cosa. Quien me recibió fue la madre de mi mejor amigo. Una señora super divertida y dulce quien al verme, no creyó que yo iba como un loco en contra de su hijo. Al contrario, ella me abrazó fuertemente y me dijo unas cuantas palabras. Aún recuerdo lo dulce que fue conmigo, pero.. mi meta estaba al final del pasillo, en el cuarto de él. Fui hasta ese lugar ignorando por completo a la mujer, y al entrar, él se levantó de la cama con rapidez pero con su debida dificultad. ¿Sabés por qué? Porque Kim Namjoon poseía un brazo totalmente inútil en ese momento, se lo había quebrado. Pero a pesar de su situación, yo fui directo a su encuentro y con toda la furia, lo golpee en la cara, cayendo al instante en su cama. Su madre entró horrorizada cuando escuchó mis insultos y aunque quiso actuar, mis lágrimas parecieron detenerla pero Namjoon no hizo nada, ni siquiera me miró.. solo lloraba y se quejaba en silencio del dolor que le causaba su brazo al ser mal apoyada, pues claro, debido al golpe no pudo acomodar bien aquella parte del cuerpo antes de caer, proporcionando un dolor insufrible. Le dije un par de cosas más y luego me marché de la casa. Recuerdo.. que en ese momento quería seguir golpeándolo pero estaba agotado y en el fondo, yo sabía que él no se lo merecía.