NO ME ALEJES DE TI... [Kookmin/Kookv]

08. Pareja Perfecta.

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Mi mirada recorre la habitación del hotel, el suelo se encontraba frío, tal vez hubiera al menos usado calcetines.

Mi corazón se acelera en cuanto logró ver a Jin descansando en el sofá, el estaba tan cansado como yo, dos meses estando bajo el ojo de la prensa era realmente agotador.

-¿Desde cuando llegó del hospital? -Articule para mí mismo aún manteniendo mi mirada en él.

Su suave expresión al dormir me hace querer llorar, el jamás me había visto de esa manera y aunque tratara de afrontarlo, siempre había deseado al menos una caricia cálida de su parte.

A pasos suaves me dirijo a la cocina bostezando al aun tener un poco de sueño, el lugar parecía nuestro hogar lo cual era un poco reconfortante, aunque el frío ambiente se sintiera.

Coloco la cafetera con el café justo como le gusta a él, aunque yo lo llegara a odiar.

-Buenos días.

Escucho la voz ronca de mi esposo recién levantado.

El se dirige a las alacenas, dándome la espalda por lo que solo me dedico a recorrer sus hombros anchos con mi mirada.

Ya son 5 años desde que estamos juntos en esta farsa. "La pareja perfecta" siempre está ese encabezando en los periódicos con nuestra imagen abajo, nadie pensaría que esto tendría final, siempre sería la perfecta historia de amor, pero para ser sinceros, esto ni siquiera tuvo un inicio.

Siempre dormimos separados a pesar de que los hermosos anillos decoren nuestros dedos anulares ¿Desde cuando nos consumió la rutina?

Diariamente huyo de la empresa y el se marcha al hospital sin mirarme una sola vez.

¿Puedo decir que el amor se acabó? ¿Realmente existió un nosotros? Puedo decir que yo fui el idiota que trato de amarlo y cayó. Caí por el aunque sabía que jamás me miraría con amor.

-Me voy, Jimin.

Escucho aquel tono tan cortante y siento mi pecho retraerse, nunca me llamo de una forma amorosa, a excepción de cuando las cámaras están sobre nosotros, el es la pareja perfecta solo cuando la luz apunta a él.

-Si, amor, yo... ¿Te espero para cenar?

-Puedes llamarme solo Jin, ya lo hablamos. Y sabes que el hospital estará lleno, no creo poder lle-

-Lo sé, solo quería saber si podías solo por hoy hacer una excepción, la junta que tendré será corta y llegare temprano, por favor.

Mi mente rogaba el que aceptara, aunque sea solo por obligación. No quería estar solo, cada vez más la soledad me consumía, habían algunas veces que no lograba reconocerme.

-Tengo que hacer una operación, es bastante importante, lo siento.

La indiferencia estaba en su rostro, no sé por qué me sorprendo si esa expresión siempre está dirigida a mí.

-Bien, ve con cuidado.

SeokJin da un asentimiento y se dirige a la puerta, pero, no se en que momento mis piernas se movieron solas y ahora me encontraba frente a su espalda.

-Jin, espera

Mis brazos rodean su cintura y mi barbilla queda recargada en sus hombros ¿Habíamos tenido un acercamiento así en estos días? No, esto era el mismísimo cielo para mi. Mis labios quedaron cerca de su oreja, por lo que susurre hacia el.

-Te quiero mucho, Jinnie

Deposité un beso en su mejilla, habían pasado varios segundos en donde el se movió y un poco de esperanza se instaló en mi pecho. Esperanza que se fue al sentir como mis brazos eran retirados.

Vi que volvió a asentir y aun dándome la espalda salió de la habitación del hotel, cerrando la puerta frente a mi.

Mi mirada se queda en el color marrón y detalles dorados de la puerta, mi cuerpo comenzó a temblar y sin pensarlo, mis lágrimas comenzaron a empapar mis mejillas.

A un paso lento camine hacia la puerta ¿Por qué no podía ser amoroso conmigo? ¿Había algo mal en mi? ¿Tan imperfecto soy?

Mi espalda se recargo en la puerta y lentamente fui bajando hasta quedar sentado en el suelo, entonces las lágrimas salieron con más intensidad.

Ansiaba poder sentir el amor del que todos hablaban, ansiaba poder ver mi mundo de rosa.

Pero parecía que jamás llegaría ese momento para mí.