𝐖𝐇𝐀𝐓 𝐖𝐄 𝐖𝐄𝐑𝐄 ¹ | Sᴀsᴜᴋᴇ ᴠs Nᴀʀᴜᴛᴏ ✓

⁰² | ᴛᴜ ᴀᴜsᴇɴᴄɪᴀ

語り手
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La noche brillaba en su máximo esplendor, la casa de los Uzumaki era invadida por un silencio profundo y acogedor, y no era extraño, el reloj marcaba las doce en punto, las casas vecinas estaban en la misma situación, gozosas del arrullador silencio de la noche, solo quedaba una cosa por hacer, ir a la cama y descansar para el día siguiente.

ㅡ Boruto. ㅡ El joven Uzumaki se detuvo ante el llamado de su madre, quien sin la necesidad de tener que voltear a verle, lo había atrapado subiendo las escaleras a escondidas de ella.ㅡ Ami ya esta durmiendo, ¿porqué tú no? ㅡ

ㅡ Estoy ocupado ahora... No puedo. ㅡ Dijo sin mirar directamente a su madre, para así seguir presionando las teclas de su videojuego, importandole poco la mirada furiosa de su madre.

ㅡ Boruto, ya es tarde, deja eso, ¿quieres? ㅡ Un tanto fastidiado terminó su juego y se lo dio a su madre, o eso intento hacerla creer.

ㅡ Bien, toma. ㅡ Estaba por poner el pie derecho en el primer escalón para subir lo más rápido posible, pero su madre lo hiso detener.

ㅡ Boruto, no estoy jugando... Dámelo ya. ㅡAl instante el rubio acató la orden de su madre, nada pasaba desapercibido por la castaña. ㅡ Descansa cariño. ㅡ

ㅡ ¿No crees que tú también deberías descansar? ㅡ Preguntó el oji jade al ver como su madre seguía sentada en la sala, a la espera de algo, o alguien.

ㅡ Solo leeré un poco más, después iré a dormir. ㅡ Dijo sin apartar la mirada de aquel libro que tenía en manos, esperando que su pequeña mentira le resultará convincente si le veía con el mismo abierto de par en par.

El joven sabía que la lectura de aquel libro era una simple excusa para poder esperar a su padre, cosa que le molestó, no era tonto, aquel hombre que se hacía llamar el Hokage, no era del todo bueno ante sus ojos, sí, podría ser un buen líder, pero no un buen marido, ni mucho menos un buen esposo, en distintas ocasiones llegó a pensar que su madre no merecía a un hombre como aquel, pensaba que realmente debían separarse, por el bien de ambos.

Pero aquella distancia que veía en sus progenitores la tenían todos los matrimonios, o eso quería creer, para no sentirse tan duro con quien era su padre.

ㅡ Como digas. ㅡ Soltó levemente enfadado por su forma de ser, no había nada que pudiera hacer para cambiar la actitud de su madre, tan despreocupada por si misma, pero atenta al resto. ㅡ Hasta mañana. ㅡ

ㅡ Hasta mañana cariño. ㅡ La mayor fijó su mirada hacia el reloj que colgaba de la pared de la sala, eran pasada de las doce, estaba más que claro que su esposo no llegaría a dormir. ㅡ Ya es demasiado tarde, no creo que vaya a llegar, quizás Boruto tenga razón. ㅡ Cerró el libro y subió a su habitación, aún con la esperanza de escuchar llegar a su marido.

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Las luces de la mansión Hyuga se encontraban apagadas, a excepción de la habitación de la ahora líder del clan Hyuga. En ella estaban un rubio y una azabache recostados en la cama de esta última, el rubio por su parte dormía plácidamente, mientras que la oji luna paseaba su dedo índice por el pecho desnudo de este, mientras parecía meditar un poco en sus actos, finalmente había logrado su cometido, y ahora todo iría conforme a sus planes.

ㅡ Hinata . . . ㅡ Alguien llamó a la azabache desde el exterior de la habitación. Esta rápidamente tomó su bata y salió para atender a quien fuera que estuviera llamándole.

ㅡ ¿Qué necesitas Hanabi? ㅡ Preguntó la mayor, viendo como su "pequeña" hermana intentaba ver hacia el interior de su habitación, buscando algo.

ㅡ ¿Enserio caíste tan bajo? Nami es tu amiga, y esposa de Naruto, comprendes que está casado, ¿verdad Hinata? Recapacita de una vez, antes de que sea demasiado tarde. ㅡ Solo había intentado advertirle.

ㅡ No me interesa . . . Anda, ve y cuéntale sobre nosotros, si se entera, por mi mejor. ㅡ La expresión en el rostro de la joven dejaba en claro que ella no se atrevería a hacer tal cosa. ㅡ ¿Pero que estoy diciendo? Jamás se lo dirás, por que eres tan débil que no eres capaz de verla sufrir, ¿o me equivoco? ㅡ Parecía querer jugar con su mente.

ㅡ Si de débiles hablamos, tú sales ganando, mira que esperar a que caigan las sobras de otros. ㅡ

ㅡ Tú no vas a decirle nada. ㅡ Finalizó la azabache mientras apretaba el brazo de la contraria, ya estaba harta de su comportamiento, nada ni nadie se interpondría en sus planes.

ㅡ No, no diré nada, por que tengo la esperanza de que recapacites, y recuperes un poco la jodida cordura. ㅡ Y finalmente se fue.

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A la mañana siguiente, Naruto despertó sintiendo un tanto de culpa por su cometido, realmente había tomado la confianza de su amada esposa para tirarla por el caño.

ㅡ Buenos días Naruto.ㅡ Habló la azabache a sus espaldas mientras rodeaba al rubio, sonriendo y mostrando un tanto la felicidad que en ella no cabía.

Naruto negaba, y se pensaba para sus adentros, "¿Qué diablos he hecho?" ㅡ Lo siento Hinata, lo que pasó entre tú y yo no debió haber pasado... Perdóname, pero debo irme. ㅡ Como pudo, y a pasos apresurados, salió de la habitación sin dar vuelta a atrás.

ㅡ Naruto . . . ㅡ Susurró esta mientras veía como el rubio se iba sin mirarla una última vez. Pero después de todo, lo comprendía.

Él no la amaba.

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ㅡ ¡Buenos días mamá! ㅡ Gritó la menor de los Uzumaki, corriendo en dirección a la cocina, esperando encontrarla a ella y su familia entera.

ㅡ Buenos días Ami, ¿descansaste bien? ㅡ Preguntó Boruto mientras acomodaba los cubiertos en sus lugares, su madre le había pedido su ayuda para servir el desayuno.

ㅡ Si, gracias. ㅡ Agradeció la menor por el plato de comida que este le había puesto al frente.

ㅡ Mamá, papá no llego, ¿cierto? ㅡ Cuestionó el oji jade en cuanto estuvo a su lado, más no hiso falta que esta contestara, su mirada levemente baja lo había dicho todo.ㅡ Es un idiota. ㅡ Susurró, aunque fracasó en su intento de no ser escuchado.

ㅡ ¡Boruto! ㅡ Reprochó su madre, enojada por el vocabulario del menor.