Dangerous Love ||Draco Malfoy

Capítulo 1

⚠️Esta obra tiene contenido adulto y explicito⚠️

Ahora si, disfruten.

Para una joven soñadora la vida cada vez se complica más a manera que ésta avanza. Como personas que anhelamos cosas y tenemos sueños cada paso que damos es importante.
Hermione, llena de sueños e ilusiones tenía una de esas vidas complicadas, al menos dentro de su cabeza era así.
Su madre tenía resuelta su vida para ella y para su hermana, Elena estaba comprometida con un apuesto hombre, era divinamente rico, de esos que solo aparecen en los libros. Elena colgaba del brazo de su prometido con una gran sonrisa a la luz del sol paseándose por los jardines para que los vecinos la vieran, era un hombre que no podías odiar pero tampoco podías amar del todo.
Hermione por otro lado había sido emparejada con Theodore Nott, un apuesto joven, medianamente rico que estaba más que encantado de casarse con ella inmediatamente, de ser por él ya estarían casados. Pero Hermione no era de fácil manejar, a pesar de la constante insistencia de su madre para casarse con Theodore ella buscaba mil pretextos para retrasar todo, ni siquiera se había anunciado ningún compromiso, por lo que en teoría ella seguía soltera a los ojos de la sociedad.

Para Elena era tan facil, toda su vida había buscado encontrar marido y ser una perfecta ama de casa, usando joyas carísimas y tener hijos...todas esas cosas que eran estupideces para Hermione.
La castaña tenía grandes sueños, posiblemente era culpa de su propia madre, le había enseñado a creer en cosas grandes, leer y ver el mundo diferente, al parecer todo era meras tonterías en la vida real. Ahora que sus hijas tenían suficiente edad se la pasaba hablando de lo importante que era conseguir marido para tener una buena vida.
La señora Granger había tenido una vida increíble, se había casado con el hombre de sus sueños, desgraciadamente ese maravilloso hombre había fallecido hace tres años, dejando a sus tres hermosas mujeres solas en el mundo. El dinero cada vez era menos, y mujeres en esa epoca no tenían mucha oportunidad de encontrar empleo y solventar los gastos de una casa.

Elena y Hermione quedaron más impactadas cuando su madre llego con una nueva notícia que cambiaría sus vidas, ya que sus hijas aún no se casaban ella tendría que aceptar una propuesta de matrimonio. Lucius Malfoy era el nombre de aquel hombre que le había propuesto matrimonio a la señora Granger, ella pensando en su futuro, aceptó.

-Tal vez si ya hubieses aceptado el compromiso con Theo ¡madre no tendría porque casarse!- gritó Elena mientras Hermione le ayudaba a atar su corset.

-Sabes que de todas formas ella ya aceptó, no importa lo que yo haga- Elena miró a su hermana por el espejo con las cejas torcidas.
-Además no puedes obligarme a casarme con Theodore, Lena-

-No te estoy obligando. Como tu hermana mayor me aseguro de que tengas un buen futuro, no puedes quedarte a esperar ese príncipe azul que tanto sueñas-

-No quiero un principe, ese es el problema. Me gusta estar sola- Elena negó y se giró para ver de frente a la castaña.
-¿Qué pasa?- preguntó Hermione al ver la cara de su hermana.

-No estas usando un corset, Mione- le regañó.

-Sabes que odio usarlos, son incomodos- su boca se convirtió en un puchero.

-Mamá dijo que tenemos que estar perfectas esta noche, no quiere que los Malfoy se lleven una mala impresión en la cena- la castaña suspiró y buscó entre su ropa un corset.

-¿Los Malfoy? Creí que solo era Lucius-

-Tiene un hijo, Draco me parece que es su nombre- Elena tomó el corset y ayudó a su hermana a ponerselo, no sin antes escuchar como se quejaba por ello.

-¿Tendremos que soportar a Lucius y su hijo?-

-Tu más que yo si no te apuras a casarte, irás a vivir con mamá a la Mansion Malfoy hasta que te cases- Hermione puso una mueca.
-En realidad Theodore es increíble, deberías agradecer que alguien está interesado en ti a tal punto del matrimonio-

-Necesito tiempo, Lena. A penas conozco a Theo, no quiero hacer algo de lo que después me arrepentire. Tu deberías hacer lo mismo- Elena tiro con fuerza de las cuerdas de corset y dejó a Hermione sin aliento.

-Yo estoy feliz casándome- aseguró con una ceja alzada -ahora, dejemos de estar perdiendo el tiempo y arregla ese vestido que ya casi es hora de recibir a los invitados- Elena salió de la habitación con gran elegancia.

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