Viendo la pelea de Naruto vs Pain

Capitulo 2.

Se ve a Tsunade en su oficina después de que Naruto se fuera, con la cabeza gacha y empieza a recordar.

—En verdad lo siento. Siempre obtienes la pajilla más corta—, Jiraiya suelta una gran carcajada.

—¿Que te sucede?

—Digo que tu deberías haber sido Hokage. El Tercero siempre quiso que fuera tu el...—, dijo Tsunade con palabras arrastradas y mejillas sonrojadas por el efecto del sake.

—No seas ridícula Tsunade, nunca me interesó el puesto de Hokage.

—Nunca me interesaron esas cosas, solo el seguir mi propio camino...

—Estoy totalmente de acuerdo con ese guapo—, dice Jiraiya señalado a su yo de la pantalla.

—Es tal cual como lo recuerdo—, dice Naruto en voz baja mirando a su antiguo maestro.

—En verdad te arrepientes por no haber sido capaz de detener a Orochimaru, así que todo esté tiempo estuviste rastreando sus movimientos tú solo ¿Verdad?

—¿Orochimaru? ¿Ese no es el papá de Mitsuki?—dice Boruto.

—Parece que si, pero ¿Porque había que detenerlo?—, pregunta Sarada.

—Eso no es de tu incumbencia, Sarada.

—No seas tan frío con tu hija, Sasuke—dice Itachi mientras su hermano solo chasqueó la lengua molesto.

Jiraiya baja la cabeza un poco apenado.

—Ya no tengo necesidad de hacerlo , eso significa que muy pronto voy a sacar a la venta la secuela de mi novela.

—¿Logré sacar la secuela de mi novela?

—Lamentablemente no alcanzo, Jiraiya. Lo cual es una pena porque soy un gran fan de sus novelas—, dijo Kakashi señalando el libro que siempre llevaba en el bolsillo.

—Ven aquí, seguidor mío, déjame firmarlo—Kakashi se para contento de su asiento y va donde el Sannin a que le firme su libro pornográfico.

—Muchas gracias, Jiraiya-sama— dijo el Sexto antes de empezar a leer el libro por milésima vez.

—No lo puedo creer, la Quinta es una alcohólica apostadores compulsiva, el Sexto al parecer es un gran fan de los libros que escribió Jiraiya y el séptimo parece un adolescente depresivo ¿Estos son los grandes Hokages?—, susurró Sarada mientras veía Tsunade que miraba casi con añoranza los recuerdos en la pantalla, a Kakashi que se cubrirá la boca, más de lo que ya estaba, mientras se sonrojaba y el séptimo que jugaba a las manitos con Himawari aprovechando la pausa que se generaba cada vez que hablamos. Sarada miró al Kazekage que estaba sentado con compostura con un aura de poder a su alrededor ¿Porque nuestros Hokages no se ven igual de magestuosos que el?

—Se lo que estás pensando y mi tío Gaara no es tan genial como crees, aún duerme con un oso de peluche.

—Viéndolo de esta manera no se ven tan geniales.

El recuerdo desaparece y y Fukasaku llama a Tsunade que estaba perdidas en el laberinto de su memoria.

—¡Tsunade! ¡Tsunade!

—¿Esta bien, maestra?—, pregunta Sakura.

—¿En serio le preguntas eso a una persona que acaba de perder a un gran amigo y compañero de toda la vida?—dijo burlona Ino.

—Oh, cállate, Ino cerda.

—Hace tiempo que no me llamás así, frente de marquesina—, dijo Ino ofendida.