Que Alfa Tan Raro // KooV//

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~ Lauv - Never Not ~

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A ver... ¿Que tenia que decir?

Nada. Absolutamente nada.

¿Por que?

Su padre... Lo mando... A comprar...

Mierda.

– ¿Entonces?– la voz de una chica le hizo apartar los ojos de los vibradores.

– Y-Yo no se que-que llevar– trago en seco. No era virgen entonces, ¿entonces por que estaba mas rojo que un tomate maduro?

– Como se nota que eres un principiante.– murmuro la chica.

– ¡No soy un principiante!– se quejo.– Solo que es incomodo... Eh... Solo- ¿Solo me podría dar un dildo o un vibrador... O-O algo?– tartamudeo frotándose la cara a ver si se dignaba a ponerse de un color normal.

– Esta bien. Tome– le dio unos paquetes todos del mismo producto pero de diferentes diseños y colores.

¿Por que? ¿Por que la gente lo hacia sufrir de esa manera?

Su padre al llamarlo cual loco mientras que estaba hablando con su suegra, le mando a buscar un dichoso objeto que no hacia mas que ponerle la cara mas roja que la camisa que tenis puesta.

– ¿De-Debo elegir?– pregunto viendo todos los empaques.

– Si.– ¿no era obvio?

– Bien...

¿El morado?... O ¿El blanco?

Quizás... ¿El transparente con estrellitas?

Ay santa mierda.

– Ta-Tal vez... Este... No... Si, este.– trago en seco apuntando y extendiéndole el que se conectaba vía BlueTooth con el celular y era transparente con lunitas y estrellitas... Que creatividad ¿No?

– ¿Seguro...?– el azabache asintió.– Bien. ¿Algo mas?– negó como si su vida dependiese de ello. La mujer lo iba a matar y si le hacia sonrojarse aun mas, ¡iba a explotar!– Entonces sigame.– le guió hasta la caja, no sin antes comprar algunos condones... Era para otra cosa...

Tomo un taxi yéndose a la casa antes de que la noche reclamase su hora. Apenas llego cerrando la puerta su padre bajo las escales y al verle sonrió.

– ¿Esta lo que te pedí?– JungKook asintió. Agarro la bolsa llevándosela escaleras arriba.

– ¡Espera. Los condones son mios!– apenas pronuncio aquello y recibir la mirada llena de burla de su padre se volvió a poner igual de rojo que en la Sex Shop.

– ¡Guarro, pervertido! No te crié así– agarro lo único que le importaba dándole la bolsa mientras se iba aguantando la carcajada mas grande de su vida.

– ¡Papa!

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– Entonces... ¿Te mandaron a comprar un dildo?– YoonGi pregunto con burla. JungKook apenas todos se reunieron para el almuerza contó su fatídica —o mas bien vergonzosa— experiencia en una Sex Shop.