♡𝗠𝕀 𝗡𝕀𝗡𝔸 𝗟𝕆𝗖𝔸 𝗘 𝕀𝗡𝕊𝗢ℙ𝗢ℝ𝗧𝔸𝗕𝕃𝗘♡

•𝟚𝟰•

— Igual ya sabía que eras joven - Rie -

— ¿Es por la cara verdad? - Acenti con la cabeza - ¿Y tu?, debes de tener 15 o 16, ¿No? - Acenti con la cabeza - ¿Encerio?

— Si, me adelanté algunos años.

— Debes de ser la más inteligente de todas.

— Si, junto con mi amiga Wiam.

En toda la noche hablamos y reimos de tontería. Al fin y al cabo el nuevo director era súper buena onda. Aún que siendo sincera es muy joven para trabajar de director. Pero se ve responsable e inteligente por como habla y actúa.

No entiendo el porqué, pero siento que ya conseguí un nuevo mejor amigo. Desde que Rugge me abandonó, mis amigos me abandonaron, incluyendo a mi propio hermano. Los únicos amigos que tengo son Wiam y Agus. Bueno, aún no se si Aguis y yo seguimos siendo amigos, ya que descubrí que le gusto.

Nunca pensé que Agus gustaba de mi desde que tenía cinco años. Pensé que sólo me quería como amigo, pero nunca pensé que queria ser algo más que amigos. Ahora entiendo porque siempre miraba mal a Ruggero cuando estábamos juntos. Al principio pensé que estaba celoso porque le prestaba más atención a Rugge que a él.

Se ve que todo a cambiado mucho. A veces me gustaría que todo fuera como antes. Cuando éramos unos niños ingenuos y pesados. Bueno.... yo era la pesada en ese momento, pero saben de lo que hablo. Como extraño ser niña.

En toda la noche, Matteo me contó de su vida. Sus padres son diplomáticos y viajan muy seguido, por eso acepto el trabajo de director. Antes de este trabajo el viajaba a muchísimos lugares: Londres, Estados Unidos, México, hasta China. Era muy interesante.

Me contaba sus aventuras y de los lugares más lindos que vio en su vida. Al verlo hablar de aquellos lugares, parecía que su rostro se iluminaba. Le gusta viajar y se nota.

Seguimos hablando de cosas tontas e inútiles, hasta que Matteo me preguntó de mi. Me pregunto de mi vida y de lo que me gustaba antes. En ese momento mi rostro que antes expresaba felicidad, se fue apagando. Recordar que ya no tengo amigos y hermano duele un poco.

— ¿Estas bien? - Me pregunta y me abraza por los hombros -

— Si, solo que.... ese tema es un poco complicado de explicar.

— Si quieres desahogarte, aquí estoy para ti - Tomando mi mano y pasando su pulgar delicadamente -

De apoco le fui contando lo que pasaba en mi vida, hasta llegar a la parte de la historia en donde todos me odian. No podía evitar derramar mis lágrimas al recordarlo todo. Recordar que mi hermano dijera aquella frace que tanto me dolió.

"— No hace falta que nos cuentes esa historia Karol, ya nos la contó Ruggero - Se queda callado - ¿Sabes?, a veces me gustaría no tener hermana"

Esas palabras fueron las culpables de mi corazón echo añicos. Cuando se fue sin decirme nada y empujar me como si fuera una completa extraña, hizo que mi mundo se fuera abajo. Todo lo que yo admiraba de él, todo lo que yo quería ser como el, todo eso se esfumó. Ya no siento lo mismo que antes por el. Ya no siento que sea mi hermano.

— Si ellos no valoran lo que hiciste, ellos son los que están mal - Vajo mi cabeza, mientras que esta apoyada en el pecho de Matteo -

— Lo peor de todo es que mi propio hermano me odia y ahora no se que hacer.

— Como decía mi abuela: "Non c'è peccato peggiore che far piangere un viso che ci ha regalato i suoi migliori sorrisi"

— ¿Y qué dice? - Limpiando mis lágrimas -