•𝟚𝟴•

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Karol.

Estaba abriendo mis ojitos, cuando siento un brazo que rodea mi cintura. Trato de voltear me ver quien es, pero al hacerlo veo a un Ruggerito dormido a mi lado. Se veía tan tranquilo que evité moverme. No entendía como había llegado aquí a su cama, pero eso era lo menos que me importaba.

De apoco podía sentir como Ruggero se remobia en su cama. Se estaba despertando y yo estaba nerviosa. No sabía que hacer, solo me hice la dormida, esperando que Ruggero no sea tan brusco conmigo.

— Buenos días preciosa - Susurro en mi oído y luego beso mi cuello - espero que hallas dormido bien.

Y en eso se levanta de la cama, para luego cargarme y dejarme en la mía. De repente siento que la puerta del baño se abre y se cierra. Abro los ojos y veo que Rugge ya no está. Estaba en el baño.

Me levanté con cuidado de la cama y caminé silenciosamente hacia la puerta. Salí rápidamente del cuarto y corrí hacia el cuarto de Wiam. Espero que no esté Candelaria, ya que todos saben quién soy ahora. Seguramente se burlara de mi y aprovechara que los chicos ya no están conmigo. Ya puedo escuchar su maldita risa irritante.

Al llegar a su cuarto, tocó rápido la puerta y me atiende Candelaria. Al ver que era yo se sorprendió. Se quedó callada unos tres minutos, hasta que reaccionó.

— Karol, ¿Buscas a Wiam? - Susurrando -

— Si, si, ¿Ella está despierta? - Jugando con mis dedos -

— No, esta dormida. Ayer tubo una noche mul loca y necesita descansar.

— Ha, okey. Gracias de todas formas - Intente irme, pero Cande me detuvo -

— Karol, antes de que te vayas. Quería pedirte perdón por todo lo que te hice en nuestra niñez. Se que no fui muy buena que digamos, pero quiero cambiar y quiero empezar ahora.

Sinceramente eso no me lo esperaba de Candelaria. Nunca la había visto tan.... amable. En sus ojos se nota que quiere cambiar y voy a apoyarla. Se que no ha sido la mejor persona en el pasado, pero se que si quiere cambiar ahora lo logrará.

— Te perdono y si quieres, podríamos ser amigas e iniciar de nuevo.

— Eso me gustaría - Sonrie -

— Okey. Hola, soy Karol ¿Y tu? - Extendiendo mi mano -

— Soy Candelaria, pero puedes decirme Cande - Ambas estrechamos las manos y luego reimos -

— Ahora que somos amigas, ¿Por qué estás triste?

— ¿Triste?, ¿Yo? - Me señalo y ella Asiente con la cabeza - no, para nada. No estoy triste.

— Karol, antes no era tu amiga pero se cuando estás triste. ¿Qué sucedió?, ¿Es por Rugge? - Asenti cabizbaja - Tengo una idea, ¿Qué tal si salimos las dos juntas y me cuentas lo que te sucede?, tal vez pueda ayudarte.

— Eso me encantaría - Sonrio -

— ¿Te parece a las 12:30?

— Me parece perfecto - Bese su mejilla y nos despedimos -

No sabía si volver a mi cuarto o ir a otro lado. No quería ver a Ruggero a los ojos, ya que el y yo dormimos en la misma cama. Se que el me puso en su cama, no soy tonta. No me duele si el no me lo dice, pero me dolería que no lo admitiera si yo se lo preguntó.

Estaba apunto de llegar a mi cuarto, cuando alguien me pone el pie y me caigo. Me caí en posición de perrito, raspando mis rodillas y mis codos. Trate de levantarme, pero alguien me empujó al suelo. Voltee para ver quién era y no me sorprendía nada. Era mi hermano.

♡𝗠𝕀 𝗡𝕀𝗡𝔸 𝗟𝕆𝗖𝔸 𝗘 𝕀𝗡𝕊𝗢ℙ𝗢ℝ𝗧𝔸𝗕𝕃𝗘♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora