ADELANTOS DEL LIBRO

3.4K 90 8
                                        

-Phoebe-despierto con los golpes en la puerta y la voz de Ted-, ¿puedo pasar?

-¡Un momento!-remuevo a Alex fuertemente y cuando se levanta exaltado le tapo la boca- Ted está fuera levántate.

-¡Phoebe!-nos levantamos rápidamente y arreglamos nuestra ropa y cabello-¡Voy a entrar ya!-entra y nos mira con aire sospechoso, entrecerrando los ojos-¿Qué hacíais?

*************************************************************************************************************

-¡Pues no sabes las cosas que hago pensando en ella, y lo que tengo programado hacerle!-la cara de Ted empieza a enrojecerse de rabia-¡Y creeme!¡Phoebe acabará chillando mi nombre, pidiéndome más!

-¡Voy a matarte, hijo de puta!-dice Ted gritándole a Lucas, lanzandose a él, enzarzándose en una pelea.

-¡Ted, para!

No quiero que se pelee, se hará daño y además Lukas ya tendrá suficiente con lo que le hará pagar papá. Veo a Alex acercarse a toda prisa a nosotros, apartando a Ted de ese imbécil.

-Señor Grey, pare.

-¡No quiero, suéltame!¡Intentó violar a mi hermana!

-Señor Grey, yo también tengo ganas de matarlo, pero no creo que le apetezca salir en todas las revistas de cotilleo.

Ted deja de tratar de zafarse y nos vamos a un rincón, dejando a la gente cuchicheando, pero nadie ayuda a Lukas.

-¿Y tu por qué tienes tantas ganas de matarlo, eh? ¡¿También quieres aprobecharte de ella?!

***********************************************************************************************************

-Alex-gimo en su oído, mientras me muevo sobre él.

-¡Oh, Phoebe!-suspira cuando mi uñas se clavan en su espalda-Te quiero, te quiero.

-Yo también te quiero.

-Cabálgame-me pide mirándome a los ojos.

Hago lo que me ordena al instante, esto es demasiado. Nuestro roce es exquisito, demasiado placentero. Esa sensación tan cálida se va concentrando en mí, noto como él empieza a tensarse bajo mí.

-Phoebe, así, no pares.

Justo antes de llegar a lo más alto, la puerta se abre y miramos sorprendidos a la puerta...

************************************************************************************************************

Abro los ojos, estamos en el salón de casa y están todos aquí: mis padres, Ted, Ava, tía Kate, tío Elliot, tía Mia, los abuelos y Taylor. Pero me falta alguien. Alex no está.

-No cariño, no te levantes-dice papá cuando me siento, pero yo aparto la mano que tiene sobre mi hombro.

-¿Dónde está Alex?-digo hiperventilando.

-Phoebe-dice sentándose a mi lado, cogiéndome la mano-, no losé. Le perdimos de vista, debíamos sacarte de ahí.

¡No! No puede ser, no puede haber... lágrimas salen de mis ojos y papá, mamá y Ted me abrazan. Ninguno me pregunta por qué lloro por él, lo que agradezco. Solo una persona a parte de mí, que esté aquí sabe porque lloro. Me separo de todos y camino hacia las escaleras, quiero estar sola.

-¿Estás bien?-dice Ted a mis espaldas.

No respondo, solo sigo andando. En el momento en que mi pie toca el primer escalón, tocan a la puerta y me detengo. Taylor va hacia la puerta y cuando se abre, mi corazón vuelve a latir. Está golgeado y con la ropa rasgada. Pero está vivo. Está conmigo.

-¡Alex!

Corro hacia él y salto a sus brazos. Me recibe encantado y envuelvo mis piernas en sus caderas. Se tambalea, pero luego me abraza fuertemente, dejando su cabeza en mi cuello, donde noto unas lágrimas que Alex derrama, igual que yo.

-Estás vivo, estás vivo, te quiero-digo mirando sus precioso ojos azules.

-Yo también te quiero mucho Phoebe.

Le beso, le beso y le vuelvo a besar. No me importa nada, solo él. Poco a poco me va dejando en el suelo y nos separamos, juntando nuestras frentes. Le miro pero Alex mira a algo tras mi espalda y me giro lentamente encontrándome a toda mi familia mirándonos. Lo que más me preocupa son las miradas de Ted y tío Elliot, pero me asusta muchísimo más papá.

Papá viene hacia nosotros y me aparta para coger a Alex de la camiseta y lo estrella conta la pared.

-¡Te has tirado a mi hija!

-¡Christian suéltalo!-dicen todos a la vez, salvo Ted y Elliot.

-¡Suéltalo!

-¡¿Cómo te atreves a liarte con Phoebe?! ¡Le has llenado la cabeza de ideas absurdas!

Alex está rojo, por no poder respirar. Debo hacer algo, casi lo pierdo. No pienso dejar que mi padre le haga más daño.

-¡Como no lo sueltes te juro que me voy de casa y no vuelves a verme en la vida!

En ese momento le suelta y Alex cae al suelo tosiendo. Voy corriendo hacia él y le abrazo, recargándolo en mi pecho. Miro a mi padre furiosa, pero él no se da cuenta porque ira de la misma manera a mi novio.

Phoebe GreyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora