Capitulo 12:

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Raza el título de la historia me caga. Propongan títulos para poder cambiarlo, que a mi no se me ocurre ninguno.

También quiero decir que feliz cumpleaños a Medicengatof que te la pases muy bien y que disfrutes el cap. :3

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—¿Que tanto conoces a mi hermano?—Me pregunto por sexta vez la hermana de Eloy, mientras se colgaba de mi brazo.

—Muy poquito—Le respondí.

—¿Que tanto es muy poquito?—Siguió preguntando mientras intentaba hacer tronar mis dedos de las manos, principalmente de la que estaba colgada.

—Pues es mi primer amigo de la universidad, pero solo he ido a la universidad dos veces sin contar hoy—explique.

—Pero eres su amigo ¿No?—Insistió.

—Si, el es mi amigo—Me removí para que soltara mi mano, pero ella no la soltaba, ella seguía intentando hacer que mis dedos tronasen.

—¿Por que tu papá no puede tener novia? ¿Y tu mamá?—Era algo que siempre quise saber, pero como Joel no era capaz de preguntar eso.

—Se murió—Contesto como si nada—¿Y tú mamá? ¿Ella te quiere mucho? Yo quería una mamá para que me peinara, pero ya no me hace falta, ya aprendí a peinarme sola—Ella presumió sus coletas.

—Yo tampoco tengo mamá—Le mentí, prefiriendo decir que mi mamá está muerta a explicar que no me quiere.

—Eso es genial, tú también aprendiste a peinarte tu solo, pero tengo que decirte que tú no te sabes peinar muy bien, si quieres te puedo enseñar a peinarte—Negué con la cabeza en respuesta.

—No me gusta peinarme—Explique.

—Igual creo que no necesitas una mamá, con un papá es más que suficiente. De seguro tú papá te llevaba a los estadios y a los acuarios todos los fines de semana igual que el nuestro. ¿A donde te lleva tu papá los fines de semana?—Pregunto insistente.

—No tengo papá—Con mi respuesta ella frunció el ceño, así como no entendiendo lo que quería decir.

—¿Entonces?¿Cuando hace frío a quien abrazas? ¿Cuándo estás aburrido a quien molestas? ¿Eh? ¿Cuándo tienes hambre a quien le pides comida? No creo que no tengas ni papá ni mamá—Su insistencia me incomodaba, pero no me hacía sentir mal ni nada de eso, ella no tenía las intenciones de hacerme sentir mal, por lo cual yo no me sentía así. Ya que aunque fuera cierto que ni aunque tuviera mamá no recibiera abrazos, tampoco era algo con lo que no pudiese vivir.

—Pues así es, cuando tengo frío me tapo con una cobija, cuando estoy aburrido juego con mi teléfono, y cuando tengo hambre voy a comprar comida—Ella no parecía poder creer mis palabras, así que solo fingió creerme.

—¿Y el señor que da miedo? El debe ser tu abuelo—Fruncí el ceño al no entender de quien me estaba hablando.

—¿Quién es el señor que da miedo?—Le pregunté.

—El que se llevó a mi papá afuera, el que tenía un sombrero gracioso, el es tu abuelo ¿No?—Ella se estaba refiriendo a Alejandro.

—No—Sonreí—El no es mi abuelo, el es mi jefe—Ella me miraba nuevamente confundida.

—Claro que no, el no es tu jefe—Ella me miró mal—Cuando entraron al cuarto tú lo tomabas de la mano, y los jefes de las personas no se dejan tocar las manos y así—Me explico su punto, el cual tenía algo de sentido, lo que no tenía sentido es que yo no recordaba haber tomado de la mano a Alejandro. Que vergüenza, más tarde me disculpare con el.

Una vez mas, lejos de casaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora