Our Desired Reliquiarium:Trust ; [ys]

IV

Los días pasaban ocupados y poco a poco iba conociendo a los tripulantes. Mi trabajo mayormente consistía en ayudar en la cocina o bajar con Jongho a organizar el cuarto de artillería. De vez en cuando llevaba el inventario con Wooyoung, pero como se distraía rara vez me dejaban hacerlo.

ㅡBuenos días ㅡSusurró Yeosang con algo de sueño a mi lado; me había despertado al subir a la cama ㅡ¿Ha dormido bien? ㅡUna sonrisa pequeña se dibujó en sus labios.

Asentí con la cabeza devolviéndole la sonrisa. Yeosang era callado; nuestras conversaciones eran cortas pero me hacían sentir parte del barco. Los demás marineros (a excepción de Wooyoung) me hablaban con algo de rigidez, sobre todo San; por lo que las cálidas palabras que compartía con Yeosang convertían mi estadía en el Illusion en algo más llevadero.

ㅡTe has dormido con las botas ㅡ Comenté aun recostada en la cama ㅡ¿Has estado fuera toda la noche? ㅡFruncí un poco el ceño tratando de entornar los ojos para lograr ver mejor su rostro ㅡYa te dije que esta es tu cama, puedes dormir aquí.

ㅡDebo comprobar la ruta ㅡSus ojos estaban cerrados ㅡNo puedo darme el lujo de dormir como Mingi ㅡReí un poco ante su comentario. En la cama más cercana el nombrado roncaba estridentemente ㅡ¿Puede ayudarme con las botas, por favor?

Me incorporé aún nublada por el sueño. Con cuidado desaté los cordones y le retiré los zapatos, dejándolos caer desde lo alto a un lado de la litera. Todavía llevaba puesto el chaleco y el cinturón, en su bolsillo reposaba una brújula, una pluma y un pedazo de papel. Sentí que así dormiría incómodo, por lo que comencé a sacar las cosas de su bolsillo.

Recordé vagamente las épocas en que tenía hogar; no era mi casa, era la de alguien más. Imágenes borrosas de la mujer del patrón llegaron a mi cabeza; alta y bien vestida, retiraba el abrigo de su marido para colgarlo en el perchero, luego con cariño sacaba el reloj de su bolsillo y lo dejaba sobre la mesa. Yo era muy pequeña para recordarlo todo con claridad, pero siempre había asociado aquella escena con el amor.

Aparté algunos cabellos de su rostro volviendo a recostarme a su lado. Era guapo; no como Seonghwa quien era capaz de robar el aliento o Mingi que se erguía imponente. No, Yeosang lucía completamente diferente; él guardaba una belleza más sutil y cálida. Dentro de mi algo se preguntó cómo alguien así navegaba en un barco lleno de piratas; no hablaba como ellos, no caminaba como ellos y tampoco vestía como ellos. Para mi Yeosang era todo un misterio.

ㅡ¿Cómo terminaste en un lugar así? ㅡDije más para mi que para él ㅡ¿Por qué eres tan diferente a ellos?

ㅡDuerme un poco más ㅡSusurró acomodándose en la cama ㅡYa luego te cuento ㅡSe acercó a mí pero guardando siempre una distancia prudente.

Traté de cerrar los ojos pero apenas lo hice la puerta del camarote se abrió con fuerza. Todos nos sobresaltamos a excepción de Mingi; el alto permaneció inmóvil profiriendo sus rugidos habituales. A mi lado Yeosang refunfuñó un poco pero volvió a cerrar los ojos.