第10章

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Criar a un hijo enfermo definitivamente no es fácil

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Criar a un hijo enfermo definitivamente no es fácil. Y eso era algo que Jaden y Yusei sabían perfectamente bien.

Cuando la pequeña Takara finalmente salió del hospital, ambos padres estaban aterrados. ¿Qué iban a hacer si su pequeña se ponía mal mientras estaba a su cuidado?

Mientras estaba en el hospital les consolaba saber que había enfermeras y doctores que la podían atender al instante, pero una vez en casa ellos podrían fallar.

Amaban a su hija, pero les aterraba quedarse solos con ella.

— ¿Hermanita?— preguntó dulcemente la pequeña Umi a sus padres una vez los vio entrar por la puerta con un bulto de carne en brazos de Jaden. — Dame, dame...— insinuó estirando los brazos para que se la permitieran cargar.

— ahora no Umi.— respondió Jaden sin ánimos y comenzando a subir las escaleras junto con Yusei

— Umi, nena, tu hermanita está durmiendo— intentó convencer Mei, la madre de Yusei a la pequeña que estaba impaciente por conocer a su nueva hermana.

— ¡No!— gritó— quiero cargar a mi hermanita nueva.

— ¡Umi ya basta!— gritó Jaden a mitad de las escaleras y en ese instante la bebé comenzó a llorar— no-no-no... Sh-sh-sh-shh...— la meció en sus brazos para calmarla mientras él intentaba estar calmado también.— l-le-le va a dar otro ataque...

— Jaden, no le va a dar nada. Tranquilo...—  consoló Yusei. También tenía miedo, pero debía ser fuerte por su esposo— mírame— se acercó a Jaden y lo obligó a verlo a los ojos— ella estará bien pero necesito que tú también lo estés. Escuchaste lo que dijo Yugi, mientras hagamos que lo dijo ella estará bien.

— Pero también dijo que podría...

— Lo sé... Pero eso no pasará. La cuidaremos muy bien para que eso no ocurra. Ahora ve a ponerla en la cuna y después ambos hablaremos con nuestra otra hija.

Con lágrimas en los ojos Jaden miró momentáneamente a la pequeña que cargaba Mei a los pies de la escalera y después asintió mirando a Yusei.

Con lágrimas en los ojos Jaden miró momentáneamente a la pequeña que cargaba Mei a los pies de la escalera y después asintió mirando a Yusei

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Ella y yoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora