Tras pasar unos minutos indecisa, cojo el móvil y marco el número de Sheena.
-¿Sí?-responde, ahora si, Sheena.
Respiro aliviada.
-Hola Sheena, soy Aria.-contesto
-¡Hola! Oye... siento lo de antes. He salido con los chicos y los demás y Harry me ha cojido el móvil. Por más que intentaba quitárselo no podía y justamente cuándo me lo iba a dar has colgado.-dice.
-Tranquila, no pasa nada.-respondo y sonrió.
-¿Cómo es que me has llamado?-pregunta y añade: ¿No será para cancelar lo de la fiesta no? Por favor dime que no, yo ya he dicho que venías y...
-¡Qué no chica!-le respondo y me rio.
No pienso cancelar lo de la fiesta. Necesito relajarme un poco y lo mejor es salir por ahi.
-Te llamaba para preguntarte si mañana podríamos hablar, necesito ayuda con algunas cosas y he pensado que podrías ayudame. Si no te molesta claro...-le propongo.
-¡Claro que no! Bueno si a lo de que puedo ayudarte y con el no me refería que no me molesta, bueno ya me entiendes.- me responde y río.
-Pues mañana hablamos, ¿vale? Adiós.- le digo contenta.
-¡Sí sí! Adiós.-y cuelga.
Dejo el móvil y miro la hora. Ya casi es la hora de la cena. Salgo y veo a mi madre cocinando. Me siento en el sofá y enciendo la televisión. No hay nada interesante que ver, así que acabo viendo el reality de las Kardashian. 《No entiendo como se ha podido operar de esa manera le verdad... ¿Que le verán a esta mujer?》pienso mientras las hermanas Kardashian aparecen en escena. Al cabo de media hora mi padre llega del trabajo y mi madre sirve la cena.
Nos ponemos a cenar y le comento a mi padre lo de mi optativa. A él le parece fantástica la idea. Siempre le ha gustado oírme cantar y muchas veces él me acompañaba con la guitarra. Mi padre y yo podemos tener nuestras diferencias pero lo quiero muchísimo. Es, de momento, el único hombre que permanece a mi lado conociendome de verdad y el que me quiere con locura.
Después de cenar me voy a mi cuarto y decido irme a la cama pronto. Enciendo la tele y me pongo a ver Masterchef mientras estoy tumbada en la cama. Cuando noto que se me cierran los ojos, apago el televisor y me pongo a dormir.
Suena el despertador. Como cada mañana, me levanto, me visto, desayuno, cojo mis cosas y me voy. Al llegar al instituto me cruzo con Nathan. Me acompaña a la taquilla y vamos juntos a la clase de física. En el pasillo, mientras hablamos, choco con alguien y todos mis libros caen al suelo, junto con los de la persona con la cual he chocado.
-¡Lo siento mucho!-me disculpo mientras me agacho a recoger mis libros.
-Tranquila, no te preocupes. No iba prestando atención.-me responde una voz masculina pero a la vez un poco dulce.
Recojo uno de sus libros. Levanto la vista para dárselo y me sorprendo. Es un chico rubio, su pelo está algo alborotado. Su piel es clara y sus ojos son de un color cielo precioso.
-Gracias.-me dice y coge su libro de mis manos.
-Denada. -le respondo medio embobada.
El chico emprende otra vez su camino. Me quedo unos segundos parada.
-¿Estas bien?- pregunta Nathan.
-Sí sí tranquilo.-le respondo.
Al fin llegamos a clase de física. Durante la mañana no me cruzo ni una sola vez con Sheena. Decido buscarla cuando llega la hora del descanso, pero, para mi sorpresa, no está. Voy a la cafetería y, como cada día, me siento con Nathan y charlamos un poco sobre la fiesta de mañana.
Al llegar la última clase me sorprendo cuando en el aula veo al mismo chico de antes. Cuando me ve se levanta y se dirige hacia mi.
-Hola otra vez. He venido a devolverte esto. Antes cuando nos hemos chocado lo he cojido pensando que era uno de mis libros-me dice y me da un libro de biología.
-Muchas gracias esto...-empiezo.
-Niall.-me responde sonriendome.
-Muchas gracias Niall.- respondo mientras le sonrió.
-Denada. Bueno, vuelvo a mi clase que estará a punto de empezar.- y se despide con la mano.
Me noto un poco nerviosa cuando me siento en mi sitio. ¿Por qué será?
-Ese a cojido el libro a propósito para poder encontrarse otra vez contigo y tener tema de conversación.-me dice Nathan con cara seria pero en un tono gracioso.
Me río ante su ocurrencia. Nathan me mira con cara de: Tengo razón y lo sabes. Y a causa de las caras que me pone no puedo parar de reírme.
Entra el profesor y saco el material. Me calmo un poco. Cuando comienza la clase me acuerdo de que tengo que hablar con Sheena. Decido que cuando acabe la llamaré.
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IRRESISTIBLE
FanfictionLa vida entera de Aria cambia en el momento en que sus padres deciden mudarse. Nueva ciudad, nueva casa, nuevo instituto. Lo que significa nuevos compañeros, nuevos momentos y nuevos sentimientos.