— Despertar contigo es simplemente maravilloso — replicó Dave entre cerrando los ojos y frotándose la mejilla.
— Y que esperabas? Que te de un beso? — seguía en pie frente a su cama mientras él trataba de taparse por completo con las sábanas color carmesí.
— Esto me arde no como mi fiebre, esto es peor — seguía sosteniendo su mejilla con la mano libre.
— Es tu culpa, quién te manda a tocarme —
— Ni siquiera recuerdo haberte tocado, entonces no cuenta — respondió él, con una pasividad que me puso los nervios de punta.
— Eres un imbécil, no te mando afuera por que está lleno de caminantes —
Desperté esta mañana rodeada por su sudoroso cuerpo, mi primer reacción de estúpida fue tratar de levantarme pero el muy imbécil aún adormilado me llamó nuevamente como esa tipa que no conozco y empezó a besar mi espalda, dios.. Todo en mi se estremeció y no necesariamente por lo bien que se sintió, sino porque bueno... Tengo 20 años, el apocalipsis empezó hace un año.. No es que yo haya sido un pan de Dios, pero jamás tuve un novio estable por mis problemas con los hombres.
De ahí nuestra discusión, salté de golpe y él al darse cuenta que yo no era la tal Tessa, se puso rígido y no podía asimilar nada aún, lo ayudé con un buen golpe en el rostro. Así de simple.
— Pero tú también tienes la culpa de todo esto, por qué duermes en mi cama —
— Yo — dije acercándome peligrosamente a él — tú tienes la culpa — clavé mi dedo índice sobre su pecho desnudo — tú que estabas ardiendo en fiebre y empezabas a confundirme con una tipa, una tal Tessa, me declaras tu amor y luego quieres besarme.
— Dijiste Tessa? — Su semblante cambió por completo y sosteniendo mi mano, delicadamente la saco de su pecho.
— Discúlpame, si te hace sentir mejor me iré ahora mismo —
Esto me tomó por sorpresa, sí el se va la enana me odiara por siempre... Ella adora a este hombre, pienso que lo quiere como un padre o algo así.
— Noo — dije rápidamente sonando hasta un poco desesperada — digo, si es lo que deseas aunque no puedes dejar a la enana, ella te adora.
— Lo sé, de nuevo.. Disculpa y no volverá a suceder —
Lo miré desanimado y arrepentido, y aunque siento algo de incomodidad, debo acostumbrarme. Después de todo, lo único que tengo en este mundo son la enana y él.
— Bueno, pero intenta ya no confundirme con.. Ella —
— Ten por seguro que jamás lo volveré a hacer — sentí que sus palabras tenían doble sentido pero no dije más, salí de su cuarto después de despedirme.
— Soorpresa — gritó la enana saltando a mi espalda después de ingresar a nuestro cuarto. Esta niña despierta a tempranas horas.
— Enana, me has asustado — respondí poniendo mis manos en el pecho y fingiendo estar asustada.
— Soy un monstruo feo — dijo le enana casi gritando y haciendo ruidos extraños con la boca.
Empecé a reír a carcajadas por su ocurrencia y trate de callar al notar que para nada le parecía gracioso.
— Te comeré el cerebro y tú sólo ríes — replicó cruzándose de brazos y frunciendo el ceño.
— ¿Porqué no te comes el cerebro de Dave? — sugerí inocentemente, quería deshacerme de la enana para darme un buen baño, estaba empapada en sudor que para colmo no era mío.
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Paso A La Muerte
Science FictionEllos están al acecho y todos harán lo que sea por sobrevivir. Ahora Los instintos más bajos y humanos aparecen en situaciones de riesgo. Aquí hay sangre, odio, venganza y sobre todo deseos de supervivencia en un mundo invadido por la catástrofe...