Capítulo 35

289 29 1
                                    

Escucho la voz de Alma cerca de mi, pero por algún motivo no puedo abrir los ojos por mucho que lo intente, lo único que puedo hacer es limitarme a escuchar


-No quiero perderle, no sé que haría si ella falta en mi vida-dice Alma creo que está llorando y empiezo a sentir que tiene su mano entrelazada con la mía

-Se nota que te importa mucho ella-escucho la voz de la señorita Ives

-Si, aunque no puede haber nada entre las dos, yo sigo siendo su profesora y ella mi alumna si alguien descubre algún día si es que llegamos a tener algo, las dos podemos tener graves problemas y también está el hecho de que yo soy demasiado mayor para ella, yo llevo viviendo en bucles por demasiados años y por mucho que quisiera no podría vivir con ella en su año, si paso demasiado tiempo en su año los años me pasarán factura si me paso del tiempo que podemos salir de nuestro año y dudo demasiado de que ella sienta algo por mi algún día, al menos puedo permitirme estar a su lado e intentar protegerle todo lo que puedo-dice triste

-Yo no sé mucho de estas cosas, pero creo que por la manera en la que te mira y saltó en seguida a protegerte y que cuando ella se empezó a poner nerviosa tú fuiste la única que pudo conseguir que se tranquilizara, ni siquiera su mejor amiga lo logró la segunda vez, eso no se suele hacer por una amiga y por la manera en la que no dejaba de mirarte dice que siente algo más, yo no sé hermana, pero creo que deberías hablar con ella y aclarar las cosas, perdona si te ha molestado que te llame hermana-dice algo seria al principio pero después al final creo que ha sonreído un poco

-No te preocupes, creo que se oye bien eso de que me digas hermana, Vanessa, vamos progresando un poco en todo esto, si quieres puedes ir a descansar, yo me quedo con ella un rato por si ella despierta-

-De acuerdo, cualquier cosa no dudes en avisarme-mientras escucho como se va acercando a la puerta 

-Gracias por todo-dice Alma antes de escuchar como se abre una puerta y se vuelve a cerrar dándome a entender de que estamos las dos-Eva, no sé si me podrás escuchar pero me gustaría decirte que desde que te vi cuando despertaste en el hospital y me sonreíste me quedé embobada, sentía que debía conocerte más, saber más de ti, hacer que confíes en mi y que seamos cercanas, o puede que más que cercanas, sobrepasando la barrera de alumna y profesora, de amigas , a algo más que eso, pero dudo mucho de que eso llegue a pasar algún día, solo puedo permitirme pasar tiempo a tu lado y hacerte feliz todo lo que me sea feliz y siento mucho no haberme percatado de que no te sentías bien, pero te prometo que eso no volverá a ocurrir y que siempre intentaré que nada malo te pase, si algo te pasa no me lo perdonaría en la vida, aunque no me estés escuchando mantendré esta promesa, porque te quiero mucho, por favor quiero que despiertes para poder reunir el valor suficiente para decirte lo que siento y saber lo que tú sientes-dice dice esto último antes de darme un beso en la mano y creo que eso fue lo que hizo que pudiese abrir los ojos y la veo con los ojos vidriosos y no se ha percatado de que estoy despierta y cuando le acaricio la mano gira rápido su cabeza y una sonrisa ilumina su ya de por si hermoso rostro y lágrimas vuelven a salir de su rostro y de repente la tengo encima mientras me abraza

-Me tenías muy asustada, por favor, no lo vuelvas a hacer más, pensé que te había pasado algo mucho más grave-dice mientras me acaricia con cuidado la cara

-Perdona, ¿estás bien?-digo sonriendo un poco

-Si, los demás están bien pero preocupados por ti-dice sonriendo mientras se vuelve a sentar a mi lado-¿has escuchado algo de lo que dije antes?-dice un poco sonrojada, yo me siento un poco en la cama para estar más cómoda

-Si, un poco antes de que tu hermana saliera de aquí-digo tomando su mano

-¿Y que dices de lo que te dije?-dice mirando hacia abajo

-Esto es lo que pienso de lo que has dicho-digo antes de coger entre mis manos su hermoso rostro y acercarlo a mi y al fin nuestros labios se tocan, por fin, el momento que tanto he estado esperando, deposito en sus suaves labios un beso suave que ella sorprendentemente me corresponde, y al poco tiempo nos separamos-¿qué te parece lo que pienso?-digo sonriendo como una boba

-Me has hecho la mujer más feliz del mundo-mientras me abraza-no me esperaba que me correspondieras a lo que siento-

-Y yo no pensé de que también sintieras lo mismo que yo, desde que te vi en forma humana no pude dejar de tenerte en mi cabeza, intenté sacarte de mi cabeza pero no pude y sin querer hice cosas que no pretendía pero al final acabé haciéndolo por culpa de mi subconsciente y al final acabé aceptando de que cada vez me iba enamorando de ti cada vez más y más, pero no quise decirte nada por que tenía miedo de ser rechazada-digo agachando un poco la cabeza-pero con todo esto se me acaba de poner todo patas arriba en un instante, me has hecho muy feliz al haberme dicho todo-digo sonriendo-te quiero, te quiero demasiado-

-Y yo a ti Eva-dice antes de besarme pero nos separamos al escuchar que llaman a la puerta y rápido volvemos a estar normal como si no hubiese pasado nada-¿si?-

-Soy Vanessa, ¿puedo pasar?-

-Si-dice ella, entonces la señorita Ives entra y se sorprende al verme despierta

-Me alegra que ya hayas despertado señorita Murray-dice entrando y cerrando la puerta

-Por favor llámeme Eva-digo sonriendo

-Y a mi Vanessa- mientras se acerca y se sienta al lado de su hermana-por la cara que tiene cada una, yo diría de que ha pasado algo-

-Ya te contaré después hermana-dice Alma sonriendo

-Hay que llamar al doctor para asegurarnos de que está todo bien en tu cuerpo, pero primero deberías cambiarte de ropa, la tienes rasgada-dice mientras me mira y me doy cuenta de que es cierto, hice bien al ponerme una camiseta de tiras debajo del vestido por si las moscas

-Si, no me dio tiempo de hacer que no se rompa la ropa, lo hice sin pensar, pero cuando cogí lo que había en la mesa empecé a brillar, ¿o son imaginaciones mías?-digo no muy segura

-No son imaginaciones tuyas Eva, tus alas cambiaron y la espada al igual que lo que ellos tenían guardado y cuando te desmayaste encontramos la espada, pero no la otra parte-dice Vanessa mientras camina un poco por la habitación-¿te sientes diferentes o notas algo diferente en tu cuerpo?-

-La verdad es que si, pero no sabría decirte el qué en concreto-digo mientras me siento con cuidado en el borde de la cama para después levantarme con cuidado y noto algo en mi espalda que es raro-siento algo raro en la espalda, ¿hay algún espejo por aquí?-mientras miro a Vanessa

-Si, está aquí-dice mientras lo saca de detrás de un armario, yo me acerco y me quito el vestido, quedando en pantalón y con la camiseta que tenía debajo, me aparto el pelo y me viro para verme la espalda en el espejo y no puedo creer lo que tengo marcado en la espalda

-¿Eso es lo que creo que es?-dice Alma mientras se acerca sorprendida

-Es un ¿tatuaje de alas?-digo confundida

Ya nada es ni será como antesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora