Chapter 03

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Petunia suspiro viendo a ambos niños, su dudley, su hermoso dudders comiendo su papilla , y a su lado su sobrino, su adorable sobrino, al igual que dudley estaba lleno de comida mejillas y ropa y manos.

–Niños cochinos– murmuro limpiando a ambos con una servilleta, dudley aplaudió emocionado y harry le siguió

Petunia les daba de comer , pero jamas cargo a harry como lo hacia con su hijo, le alimenta tres veces al día, lo lleva al baño y luego a su habitación, nunca le mostró amor maternal, aunque tampoco fue una mala tía en lo que cabía de la palabra , según su moralidad claro esta.

Harry tenia cinco años, y ella sabia que no era normal , la primera vez que él niño convulsionó pensó que moriría, no era tan mala para dejarlo morir así que lo llevo al hospital , paso dos días ahí y vernon la regaño, luego le dieron los resultados y él niño tenia una discapacidad .Luego él niño se desgano no queria comer, y lo obligaba incluso dandole palmazos

Era complicado alimentarlo mientras crecía, así que lo ignoro.

Harry era un niño dulce, reía mucho viendo los dibujos en la tele de la tía petunia, lo dejaban ver una hora y luego a su habitación aunque dudders miraba todo él día y tarde excepto sus siestas.No le daban chocolates o dulces, quería probarlos, quería helado, quería un abrazo, a pesar del rechazo de su tía , su primo y tío él era simplemente feliz por que no entendía los motivos .

Su tía lo llevo al parque con dudley, y aunque le pidió que no corriera por que no iba a limpiarlo si se caía, o curarle raspones él solo corrió.Jugo tanto como pudo solo, dudley con sus amigos por que no le dejaban jugar con ellos.Harry creció en una familia que nunca fue suya, con gente que no llevaba su sangre, una vida y un nombre que no le pertenecen.

Cuando cumplió los once años, su tía le pego.

No entendió por que no habia hecho nada malo, solo le dijo que debía ser un niño bueno y le entrego una carta y lo aventó a su cuarto, harry abrió él sobre sin entender nada ahí, por la mañana su tío vernon y tía petunia discutieron, luego la tía salio con él a cuestas, murmurando maldiciones , ella le compro muchas cosas con dinero que le dio una gente rara, ella un día lo dejo en una estación de tren a su suerte.Le dijo que esperara ahí y cuando viera alguien cruzar él muro él lo hiciera.

Él fue obediente, lo hizo y siguió al resto de niños que tenian ese baúl como él suyo, subió al tren por que le pareció bonito y nunca había estado en uno, cuando arranco practicamente chillo de emoción pegado a la ventana, suspirando de felicidad.

Se durmió , hasta que él chuchu se detuvo y escucho los pasos afuera, él salio confundido siguiendolos como su tía dijo, estaba emocionado con él bote y él agua, un niño lo regaño por que podía caerse, no le hizo caso, él siguió tocando él agua hasta que llegaron a un castillo.Abrió la boca y sus ojitos se iluminaron.

Estaba en los cuentos de gandalf él mago, se preguntaba quien era él, un enano, un elfo.Siguió a los niños entraron a un salón enorme , vio mesas y mas gente extraña, él iba vestido con su hoberol color crema y su playera blanca por dentro con sus zapatos tenis de luces blancos que brillaban al caminar, la tía petunia los coció a su talla.Espero ya que ellos se detuvieron, aunque sus ojos vagaban por todos lados un poco confundido y extrañado

No recordaba que tan largo camino hizo para llegar ahí, fue pura suerte por que su tía lo encontró en walmart una vez y debía estar con ella en él mercado agricultor.

–Harry Potter–

Ese era su nombre, ese era su apellido eso le dijo dudders.

–Señor potter venga– harry camino trotando viendo sus zapatos lucirse encendiendo y apagando luces azules y amarillas, él salón estaba en silencio viéndolo pero él no se daba cuenta.

Adivina cuánto té quieroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora