꧁「 6 」꧂

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Esa caricias en su colita estaban agradándole mucho, tanto que un leve cosquilleo estaba presente en su vientre, como maripositas.

—Vamos cachorro, dime quién fue el que te dijo eso...

Y estaba bien decirle a Hyung porque confiaba en él y sabía que nunca le haría daño.

—Fueron los alfas de hoy Yoongi-hyung —y no agregó más. Nada de mencionar el manoseo a su cintura ni el acercamiento descarado a su cuello y mucho menos la plática completa.

—Esos idiotas... —murmuró entre dientes el alfa.

—¿Es algo malo Yoongi-hyung? —volvió a preguntar —ellos solo querían ayudarme ¿No? —comenzó a jugar con un mechón rebelde que caía sensualmente por el rostro de su alfa.

—No cariño, ellos no querían ayudarte, ellos se querían aprovechar de ti y tu inocencia.

—Pero... —repeló Jimin sorprendiendo a Yoongi por aún tener dudas —ellos dijeron que me ayudarían y me darían experiencia... Yo creí que así usted me querría y...

—¿Y qué amor? —preguntó Yoongi, anonadado por su declaración.

—Y así, usted dejaría de tratarme como un bebé y me ayudaría en mi siguiente celo... —murmuró —así como dice Jin-huyng que hace Nam-huyng y así como Taetae recibe mucho cariño de Kook.

¡Santa luna!
Sabía que era mala idea presentarle a sus amigos... ¡Esa bola de pervertidos!

—Amor... —sonrió enternecido el alfa —estás aún muy chiquito para que hagamos lo que nuestros amigos hacen —volvió a intentar razonar con el pelirosa —y no quiero lastimarte mi vida, sabes que eres lo más importante que tengo.

El terror a herir a su precioso gatito le estaba carcomiendo el cerebro, pero aún cuando la cabeza de abajo quisiera otra cosa, él jamás intentaría algo hasta saber que Jimin estaba seguro.

—Alfa~ —volvió a jadear el cachorro —yo también lo amo —murmuró a sabiendas que las anteriores palabras de su Hyung eran para expresar su amor sin tener que decir esa "vergonzosa palabra" –como su alfa decía–.

Una bella sonrisa de goma se asomó en el rostro pálido del más alto y este mismo bajó unos centímetros hasta chocar sus labios sobre la tersa piel de la frente de Jimin.

Entonces, los piecitos de Park se elevaron hasta las caderas de Yoongi y presionaron.
Min intentó separarse por la impresión, sin embargo, Jimin empujó hacia abajo justo sobre su espalda baja consiguiendo un movimiento brusco por parte del alfa, quien tuvo que poner sus manos a los costados de la cabeza de su chico para no aplastarlo.

Ambos se sintieron desfallecer cuando la pelvis del pelinegro chocó con la del Omega.
Vaya, ese era un límite que nunca habían probado. Se sentía tan bien.

—Yoongi-hyung~ —se sonrojó.

—Cariño, no —después un gruñido salió de su boca cuando el roce entre ambas partes se hizo presente de nuevo —por favor amor~ —susurró —basta, acabamos de hablarlo...

Yoongi no sabía si se podría contener por más tiempo.
Es más, como que hacía más calor en la habitación ¿No?

—Alfa~ —y el mencionado gruñó —por favor alfa~ —suplicó —hazme tu Omega.

Aquellas palabras sonaron como una dulce melodía tentadora y Min se sentía tan hundido en aquella seducción que ya podía sentir su pantalón apretarle más de lo normal.

—Omega~ —roncó Yoongi mientras ahora él provocaba la fricción, sonriendo halagado al sentir la reacción física de su pequeño.

Entonces, cuando una punzada llegó a su vientre y su lobo babeó en su interior...

¡Demonios! ¿En qué fecha estaban? Porque el celo de Yoongi había estado cerca cuando lo checó en el calendario hace... ¡Hace dos días!

No no no... ¡Eso no podía estar pasando!

Yoongi estaba teniendo el celo... Y Jimin estaba comenzando a reaccionar ante él.
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 Y Jimin estaba comenzando a reaccionar ante él

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«ZT»

¡Hágame su omega Hyung!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora