filthy

CAPITULO 24

lucille granger

No dormí tanto. Todo en lo que podía pensar era en cómo Draco lastimó a Enzo. Enzo no se merecía eso. En absoluto. Pero Draco es Draco, ¿y qué debo hacer cuando él es como es? ¿No suena complicado? Y todo en lo que podía pensar era en cómo reaccionó Draco poco después de que le negara la entrada a mi habitación. ¿Cómo podía esperar que lo dejara abrazarme en mi cama después de que lastimó a los suyos, a nuestro mejor amigo? La parte jodida de todo esto es que todavía siento empatía por Draco. Todo pasó muy rápido. Se suponía que tenía que hablar con él sobre lo que siento por nosotros y que necesitamos mejorar nuestra relación. Se suponía que anoche sería el comienzo del desarrollo para los dos. Otra parte jodida de todo esto es que Lorenzo todavía perdonará a Draco incluso después de que lo golpeó así. Lorenzo ama tanto a Draco. Me mata que no importa lo que Draco le haga a la gente que ama, todavía lo amaremos de todos modos. ¿Cómo está eso bien? ¿Cómo se normaliza esto? No, tengo que aguantarme. Esto es para lo que me inscribí. Hay más en Draco que solo un chico enojado. Siempre estaré invertido en él. Tal vez esa sea la parte desgarradora; No importa cuántas veces Draco me lastime, o me atormente mentalmente, todavía me voy a quedar. Debería haber escuchado a Lorenzo cuando me dijo que corriera en el momento en que siento que lo rodeo de puntillas. No, no debería haberlo hecho. Tomé la decisión correcta. Confío en mi instinto más que en nada. Realmente creo que todo esto vale la pena. ¿Pero quién sabe cuánto duraré? Solo puedes hacer y manejar hasta cierto punto. Un golpe en la puerta interrumpió mis pensamientos. Me di la vuelta en mi cama y miré a Onyx, mientras ella me devolvía la mirada. Un golpe de nuevo.

"Quieres que lo consiga, ¿no?", Asumió Onyx.

Asentí con la cabeza mientras ella gemía. Se levantó y abrió la puerta para ver a Lorenzo parado allí. Inmediatamente me levanté de la cama y corrí hacia Lorenzo, abrazándolo.

"Lo siento mucho, Enzo," arrullé.

Lo miré y noté su labio y pómulo rotos, lo que solo me hizo sentir aún peor.

"Ah, no te preocupes por eso. Sucede", se rió entre dientes poco después, "Es Malfoy. Hablaré con él más tarde".

Nos apartamos de nuestro abrazo cuando entró, cerrando la puerta detrás de él. Él se sentó al borde de la cama de Onyx y yo me senté en la mía.

"¿Estás adolorido?" Arrullé.

"No, soy un hombre de acero", bromeó, flexionando los brazos.

No sé cómo puede arreglárselas para salir adelante a pesar de haber sido golpeado con tanta fuerza la noche anterior y en la cara.

"De nuevo, lo siento, Lorenzo. No sé por qué está-".

"Lucille, dije que no te preocupes por eso. Lo sé Draco- Es muy impulsivo. Y es mi culpa- Me dijo que dejara de besarte la frente", respondió, "Aunque no escuché. Lo que probablemente dije. debería ", se rió entre dientes. "Me alegro de que todavía me veo impresionante".

Una risita escapó de mi boca y él me sonrió, aún logrando ser positivo.

"Me alegro de que estés bien, Enzo", le dije.

"Yo también me alegro", respondió, "Y Onyx, gracias por limpiar mis heridas. Eres una reina absoluta".

"Cuando quieras, Lorenzo", aseguró ella, mientras ambos se reían.

Volvió a mirarme, tratando de leer mi rostro.

"Deberías hablar con Draco."

¿Qué? "¿Acerca de?"