—Rave está de feo otra vez —se quejó Zeth.
Joshua asintió con la cabeza, dejando de lado su móvil.
—Encima la película completa no está en YouTube. No en nuestro idioma y acento —añadió.
Y la idea llegó a él.
Claro, se podría haber solucionado con un DVD, pero Joshua no reparaba demasiado en las mundaneidades. No solo era "Tierra de osos", ya con otras películas les había pasado. Ni siquiera Netflix ayudaba.
Se encargó de alquilar una sala de cine y consiguió que hicieran una función privada de "Tierra de osos". Entonces, cuando llegó el día de la función, le entregó a Zeth el cupón de cita en el cine.
—Deseo ver una película, musa. ¿Me harías el honor de venir conmigo? —pidió con tono galante.
Zeth tomó el cupón, y le dedicó una sonrisa deslumbrante.
—Cupón canjeado —dijo, antes de abrazarlo.
El vampiro y él fueron entonces. Compraron pop corn y algunas golosinas, fueron a la sala asignada y Joshua pudo obtener algo de la sangre de su esposo para untarla en sus palomitas de maíz. Vieron una película, como dos adolescentes en una cita.
Y tal vez, solo tal vez, se besaron un poco cada vez que la pantalla se oscurecía.
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Cupones de Amor
General FictionPara mi monito kanji y la familia que siempre soñamos.