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—Musaaaaa~
Joshua ingresó al cuarto con una sonrisa inmensa en el rostro. Tenía un cupón en la mano derecha y su móvil en la izquierda. Cuando vio a su esposo eligiendo ropa navideña en la cama, se sentó a su costado.
Zeth lo miró, y supo de inmediato que se traía algo entre manos.
—¿Qué sucede, agápi? —preguntó.
—Verás, musa, quiero canjear mi cupón de fotos de perfil de pareja —respondió el vampiro—. Como cambiar las fotos de nuestras redes sociales como pareja es algo que ya hacemos, pensé en darle un giro interesante a mi petición.
—De acuerdo, te escucho —indicó Zeth, recibiendo el cupón que Joshua le entregó.
—¡Escoge una de estas fotos! Yo me pondré la misma, como gemelos.
Luego de esa exclamación, el vampiro mostró las diversas opciones. No trataba de obligar a nadie a nada, quería que Zeth pudiera elegir.
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—PERO AGÁPI.
—PERO NADA. YA DIJISTE.
Joshua se acercó a su amado, señalando una de las fotos.
—¿Ves esto entre nuestras bocas? Es tu lengua —explicó de forma solemne, besando al contrario cuando vio su rostro apenado.
Ese día, sus perfiles lucieron la misma foto. Un beso húmedo que hizo a Joshua feliz, porque el tal Nabil ya no le mandaría mensajes a su esposo (????).
