ｊｅｏｎ ｊｕｎｇｋｏｏｋ +18 || ｍｉ ｓｅｘｙ ｒｉｖａｌ. [Primera, Segunda y Tercera Temporada]

gusto en verla

¿Ir de nuevo de viaje? Sonaba emocionante, pero a la vez me aterraban muchas cosas ¿Y si algo malo pasaba? Pero tenía que dejar de pensar en esas cosas y madurar, lo que pasó hace mucho tiempo quedó en el olvido, no volvería a pasar. Pero si era verdad en lo que me dijo Jimin hacerca que Jungkook, que él había cambiado y nos había maldecido ¿Sería seguro? Jungkook era alguien que a veces no usaba la cabeza, y si lo que tenía era rencor conmigo temía que algo le hiciera a mi hija, o mejor dicho a nuestra hija ¿Sería capaz de hacerle daño a alguien de su propia sangre?

Veía a Sumi durmiendo en su camita, verla como una flor delicada y a salvo me ponía tranquila, cerca de mí no le pasaría nada. Pero tenía que seguir pensando en su futuro próspero; en definitiva no la dejaría si en verdad tengo que viajar a Francia, me la llevaría conmigo

Pov's Jungkook

Regresé a casa con un fuerte dolor en el cuello y cabeza, lo primero que hice después de cerrar la puerta principal fue ir a la sala y sentarme en uno de los sofás, el día había sido agotador y el trabajo parecía interminable. Tener que pensar en tantas cosas me estresaba, no podía respirar y me sentía miserable

-llegaste -escuché la voz de mi esposa en el pasillo

-si -me paré rápido de mi lugar para evitarla pero eso no se pudo. Se interpuso en mi camino en dirección a la recamara y abrazó mi cuello

-¿Cómo te fue? -me miraba a los ojos con una sonrisa

-bien -nos dimos un pequeño beso en los labios y la abracé de la cintura

-has de estar cansado, déjame curarte

-estoy bien, Nayeon. No te preocupes -la solté y seguí camino a la recámara

Me metí a bañar para relajarme, cambié de ropa y volví a bajar para comer. Los asistentes terminaban de preparar todo para la cena y ella no faltaba. Empezamos a comer en silencio, nadie habló y era bastante cómodo

¿Qué cómo era mi matrimonio? Lindo, no había nada que presumir porque en realidad todo fallaba, no le podía dar lo que pedía y el amor que sentía por ella ya no era el mismo, yo ya no era el mismo emocionalmente; cada vez quería escapar de todo esto, porque aparte de no sentirme bien tenía la presión de volver a recuperar el valor de la empresa, mi padre cada vez no me quitaba el ojo de todo lo que hacía, cada vez que lo veía el me decía...

“acaba con todos"

“Se un Jeon y deja de llorar"

"Levántate cobarde, débil"

"Acaba con los Min"

¿Acabar? ¿Para qué? Pero era mi padre, la lealtad era lo primordial en la familia Jeon y desacatar a un mayor tendría un castigo, estaba obligado a que los Min se quedaran sin nada por rencor y al parecer ese sentimiento era hereditario, no sentía agrado en recordar a la señorita Min y su primogénita. Tenía que acabar con todos