Feliz navidad 🎄❤
Las semanas pasaron dejando que los meses se cambiaran y con ellos la llegada de la estación más cruda. Sobre todo los que no poseen materiales para calentarse como él o todo los niños del basurero. Y con la nieve peor aún.
De día se podía zafar del frío si se sentaba bajo el sol radiante, con sus rayos calurosos tocándole el rostro pero, de noche era diferente más doloroso. El sol bajaba y su cuerpo temblaba ante la baja de temperatura y al dormir, la única forma que tenían de amortiguar el frío era juntando las mantas con las de Hoseok y dormir ambos abrazados y sin olvidar de poner sus camperas en los pies, así calentar lo mejor posible sus cuerpos frágiles.
Pero esa noche era diferente.
Aún que su cuerpo estando ligeramente tapado por prendas "abrigadoras", una campera que había encontrado en la calle al igual que los pantalones largos que tenía puesto, sentía el típico frío y la nieve de la noche de diciembre pero era calentado sabiendo que no era una noche normal si no una fecha importante en todo el mundo.
24 de diciembre.
Todavía recordaba su primera navidad.
Fue cuando tenía 6 años, Hoseok había llegado unas semanas antes llorando y diciendo cosas sin sentido, recibiendo luego un castigo por no mantenerse callado y desde ese día se quedo a vivir con ellos.
Unos días bastaron para que el pequeño castaño se acoplará y permanecería alado del pelinegro de ojos claros sin alejarse ni un segundo, como un chicle al suelo.
Pero volviendo al tema.
Él de ojos claros jamás tuvo idea que existía esa fecha pero ante el relato, que un infantil puede contar, sobre esa costumbre le pareció magnífico, encantador, único.
Ambos sabían que jamás tendrían un árbol navideño con sus luces, guirnaldas, las bolas de colores y todo lo que tiene que tener. Sabían que no habría chimenea, ni regalos, ni mucho menos una gran cena.
Pero si consiguieron el espíritu.
Y decidieron hacer su propia navidad. Su árbol navideño era un árbol cualquiera que con los años creció de apoco, lo decoraban con adornos encontrados en la basura o tapas de botellas agregándole un cordón así colgarlo y dibujos de árboles o estrellas fugaces.
La estrella, aquella brillante que tenia que permanecer en la punta estaba, no era una de verdad ni mucho menos tenia luces sino que era una mas simple pero igual de importante. Era totalmente hecha de madera con decoraciones en acrílico.
Recuerda que los primeros cinco años usaban una que ellos mismo hicieron con un pedazo de cartón y un lápiz negro pero el pelinegro al conocer a la señora Jung un día como cualquiera le regalo esa maravillosa estrella y quedaron en usarla siempre.
Una sonrisa pequeña apareció en los labios del pelinegro ante el recuerdo y ver como ahora permanecía reluciente y emanando luz en la copa verde con sus adornos de bajo la promesa de niños.
–Hace mucho no sonríes Hyung.
El castaño se acercó con cuidado ya que tenia dos latas de atún redondas llenas de algún líquido calentito. Sentado ya en la piedra grande y enfrente del árbol le entregó su lata a su amigo tomándola gustoso el de ojos claros.
Una sopa humeante estaba dentro de aquel material dándole calor a su manos congeladas, sintiendo el sabor casi escaso del caldo le dio un sorbo calentando a su paso su garganta.
–Gracias.
–De nada.
Siguieron en silenció con la compañía del otro, la nieve rodeándolos y las estrellas alumbrandolos junto a la luna.
El pelinegro observando la nieve recordó al muchacho de piel blanquecina igual que el mineral congelado, no lo había vuelto a ver jamás desde aquel día pero su rostro debes en cuando divagaba en su mente haciendo que pensara la misma pregunta.
"¿Estará bien?"
Unos golpes en su brazo lo hizo reaccionar viendo a su lado y notando como Hoseok tenia en su cuerpo diversas luces de colores que cambiaban de lugar. El dedo del castaño apuntó al cielo nocturno, sus orbes se dirigieron ante lo señalado y se sorprendió ante lo visto sonriendo luego.
Los fuegos artificiales llenaron el cielo junto a globos de deseos.
Ya era navidad.
25 de diciembre.
Dejando a un lado la lata saco de su bolsillo una bolsita de color rojo con un listón dorado.
–Hoseok, toma.
El nombrado ya no prestaba atención al espectáculo de las luces sino a su amigo pelinegro y aquél regaló en mano.
Con temblor lo tomó y unos guantes rojos alumbraron sus ojos de felicidad y emoción.–¡Gracias Hyung! Yo también tengo un regalo.
Un paquete mas pequeño fue dejado en sus manos y al abrirlo con emoción, una pulsera amarilla apareció.
– Tengo una igual yo, es de amistad.
La muñeca ajena mostraba una también solo que cambiaba de color. De inmediato se la colocó con ayuda del castaño sonriendo ambos por sus regalos intercambiados.
–Feliz navidad Hoseok.
Antes que respondiera un grito femenino se hoyo a lo lejos.
–¡A trabajar basuras!
Ambos suspiraron llendo hasta la casilla tomando sus bolsas y escuchando las indicaciones de aquella mujer. Ya listo comenzaron a caminar lejos del basurero y llegando a las calles escuchando música y risas.
–Feliz navidad ChimChim Hyung.
Un codazo recibió de su amigo antes de irse por otra calle dejándolo solo y comenzando su trabajo navideño no sin antes acordarse de alguien.
"Feliz navidad chico de cabellos verdes."
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No te rindas « YM »
RandomTe pueden insultar, lastimar, gritar. Puedes perder, sufrir, rebajarte. Pero NO TE RINDAS porque la felicidad siempre te encuentra, sin importar donde estés o quien sos. ------------›› "-Un día llegaste sin la necesidad que te busqué... -¿Cómo una...