Cerca de las 8pm Lena Luthor tocó a la puerta de Kara Danvers.
—Quédate quieto— Le susurró al pequeño gato que se movía ansiosamente.
Tuvo que envolverlo entre un abrigo para de ese modo poder meterlo al edificio de la kryptoniana, ya que no se permitían animales. La cosa se complicó un poco cuando, mientras subía en el ascensor, Draco soltó un pequeño maullido, lo que captó la atención de una señora de unos 80 años. Lena no tuvo de otra más que tratar de imitar el maullido del minino.
—Soy actriz, ya sabe, estaba improvisando— Explicó, tratando de disimular el nerviosismo. —Voy a salir en Cats.
La señora no dijo nada, pero miró a Lena como si estuviera loca y antes de bajar del ascensor, la señora le recomendó ir a la iglesia y reencontrarse con Dios.
La puerta del departamento se abrió, sacando a la CEO de sus pensamientos.
—Len, hola— Saludó la rubia con una radiante sonrisa en el rostro, llevaba un hermoso suéter azul marino y unos jeans casuales; rápidamente se fijó en el pequeño bulto que se movía inquietamente en los brazos Lena. —¿Puedo cargarlo?— Sus ojos brillaron con emoción.
—Claro, pero cierra la puerta— Respondió la CEO y Kara se hizo a un lado para dejarla entrar.
En cuánto le quitó el abrigo negro que lo cubría, Draco miró a Lena con recelo.
—RAO, ES AÚN MÁS HERMOSO QUE EN LAS FOTOS— Kara tomó al pequeño felino grisáceo de los brazos de la ojiverde, quien ronroneó cariñosamente.
—Oh woow— Exclamó sorprendida al ver todo lo que la rubia había hecho.
La reportera había puesto algunas velas sobre la mesa, la cual estaba cubierta por un elegante mantel blanco, había una botella de vino y sobre la barra de la cocina había muchísima comida.
El estómago de Lena rugió audiblemente, a lo cual Kara rió un poco.
—Me alegro que tengas hambre— Comentó alegremente la rubia, mientras acariciaba la cabeza de Draco. —Siéntate, por favor, y perdón si la comida está algo fría, se enfrió cuando venía para acá.
Lena asintió con la cabeza y caminó hacía la mesa, dónde tomó asiento. Kara dejó a Draco sobre el sofá y fue rápidamente a lavarse las manos.
—Huele delicioso, Kara, ¿De dónde es la comida?
—Es de Francia— Respondió con simplicidad, salió del baño y tomó los empaques que contenían la comida.
—La comida francesa es mi favorita— Esa vez fue Lena la que se levantó y se dirigió al baño. Claramente no había entendido que Kara hablaba de manera literal.
Cuando regresó, la rubia estaba sirviendo la comida en los platos, una vez más, Lena se sorprendió al ver Confit de Pato, Quiche lorraine, Aligot, entre otros.
—No puedo creerlo— Lena se volvió a sentar y miró a la rubia con una sonrisa incrédula en el rostro. —¿En qué restaurante de la ciudad venden esto y por qué jamás he ido?— Preguntó y tomó un poco de Aligot con la cuchara.
—Es una buena pregunta— Kara se sentó en la silla de enfrente. —Y cuando sepas la respuesta dime, para la próxima quizá no tenga que ir a Francia— Miró a la CEO, expectante de su reacción.
Lena por poco se atraganta con un trozo de pato. —¿Fuiste a dónde?— La miró boquiabierta. —¿En verdad fuiste a Francia?
Kara asintió con la cabeza y se mordió el labio para no reír, le encantaba sorprender a Lena, había extrañado tanto su sonrisa.
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Exile - Supercorp/Reigncorp
FanfictionDespués de años de amistad, Kara y Lena finalmente se dan cuenta de lo obvio: ambas tienen sentimientos la una por la otra. Es así cómo ambas deciden comenzar una relación y parece que todo marcha de maravilla. Por primera vez en la vida, Lena sient...