Epilogo.

16 2 1
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


24 diciembre.

San francisco – California.

¿Sane? ¿Realmente lo hice? ¿Cure mis heridas?

Aunque las respuestas a esas preguntas eran ¨Si" no me sentía del todo segura, pelee y luche por mi familia... familia, que remota se escuchaba aquella palabra, la venganza era la única forma de sentirme bien conmigo misma, me sentí útil por una vez en medio de todo ese desastre, sentí que todas mis heridas se cerraron, al mismo tiempo que otras se abrieron, di paso a un nuevo dolor, una nueva conciencia que me carcomía el alma dejando mi cuerpo vacío.

Minnesota desapareció del mapa, nadie tiene permitido el acceso a tal lugar, soldados y doctores fueron apresados por las ordenes gubernamentales al igual que el teniente Arthur y el doctor Darmond, no quedo nadie en el estado y este se convirtió en la nueva Chernóbil, un lugar vació con una historia de peso por detrás.

Una vez salimos del estado en Michigan, nos dimos por enterados que los estados fueron afectados por el mismo problema, sin embargo, estos sí pudieron manejarlo, el problema siempre fue la raíz de la planta.

Las cosas se solucionaron, entonces ¿Por qué me siento así?

Recuerdo con exactitud a todas las personas que deje por detrás, Hazell, papa, mama, los soldados D, Giselle, un sentimiento amargo se plantó en mí, al recordar a mi mejor amiga, no regrese por ella, su cuerpo pálido quedo a la intemperie en ese lugar frio y en silencio.

Perdí a toda mi familia, no estoy sola físicamente, tengo a Bea y Jase, pero si estoy sola mentalmente, Jase durante todo este año ha sido muy fuerte conmigo y un gran apoyo, ambos hacen linda pareja y están haciendo un gran trabajo cuidando de mí, sonrío con nostalgia al verlos adornar la mesa para la cena navideña, es nuestra primera navidad juntos, el año pasado no vimos propio de nosotros celebrar ¿Qué celebraríamos? Sin embargo, aquí estamos intentando retomar nuestras vidas.

A pesar de todo ese cariño, ellos jamás sustituirán a mi familia, recuerdo como nos encantaba a Hazell y a mi adornar la casa con mama, papa siempre se quejaba porque las luces se enredaban como una esfera gigante, muchas risas, y mucho aroma a galletas y chocolate, nos amábamos, nos apoyábamos y cuidábamos ¿Cuándo cambiamos? ¿Cuándo los perdí?

El VI no es más culpable que las personas que lo crearon, por culpa de ellos, perdí a esas personas que crecieron conmigo y me da mucho agrado saber que están pagando su condena, aunque sé que eso nunca será suficiente.

- ¿Ally quieres ornear galletas conmigo? – escuche a Bea después de haber ordenado la mesa. – mis padres vendrán al atardecer, quiero que todo esté en orden. – son casi las cuatro de la tarde y el entusiasmo de Bea está haciendo estallar toda la casa, asiento con la cabeza ante la petición de la rubia y camino a la cocina.

Buscando El Destino [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora