Capítulo 9: Dia libre

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La luz del amanecer se colaba por las orillas de las cortinas que cubrían la ventana de la pequeña habitación. Sobre la cama en la esquina de la habitación, Bakugo se encontraba mirando atentamente los rasgos de la chica acurrucada sobre su pecho. Hace tan solo unas horas había llegado aterrada a su habitación y ahora se encontraba durmiendo pacíficamente contra él.

Un largo suspiro salió de los labios del chico a la vez que tallaba su rostro con su mano derecha, ya que su brazo izquierdo estaba fungiendo de almohadada en ese momento. Llevaba durmiendo dos días seguidos con ella, dos días seguidos en los que no había tenido pesadillas, y milagrosamente había podido dormir toda la noche sin despertar múltiples veces.

Desde el incidente de su secuestro por la liga de villanos, a pesar de que dijo que no había sido la gran cosa le había afectado más de lo que le gustaría admitir. Al inicio el tan solo dormir le parecía imposible, su mente lo seguía transportando a esos días y no era hasta que el sueño lo vencía que podía finalmente dormir un poco, las pesadillas por otro lado no tardaron en aparecer. Actualmente no tenía problemas en dormir, pero las pesadillas seguían apareciendo, en menor cantidad que antes, pero seguían ahí, era raro el día en el que podía dormir más de 3 horas seguidas, es por eso que acostumbraba a irse a dormir temprano para al menos completar más horas de sueño.

Un pequeño gemido a su lado llamo su atención.

Kasumi se movió a su lado restregando su mejilla contra el hombro del chico antes de abrir los ojos, un gran cuerpo casi debajo de ella fue lo primero que vio antes de levantar la vista topándose con un par de ojos que la miraban atentamente.

— Hey — susurró Bakugo.

— Hey — respondió Kasumi imitándolo.

A pesar de la oscuridad de la habitación Kasumi podía ver perfectamente esos orbes carmín que tanto conocía.

Bakugo acerco su mano libre al rostro de ella para retirar un rebelde mechón de cabello que cubría parte de su ojo izquierdo posicionándolo tras su oreja, para después posarla sobre su mejilla frotando suavemente con su pulgar el lunar junto a su ojo.

Una explosión de calor proveniente de su mejilla donde Bakugo la estaba tocando se expandió por su cuerpo, era distinto a cualquier otro que alguna vez había experimentado. Su respiración se aceleró al igual que su pulso, las puntas de sus dedos cosquilleaban como nunca antes y la necesidad de que la tocara más se plantó en su mente.

— Bakugo — susurro Kasumi estrujando la camisa del chico entre su mano.

La mirada del chico, la cual anteriormente estaba sobre los ojos de ella, había descendido encontrándose con sus labios, estaba entrando en terreno peligroso y lo sabía, y a pesar de eso, no quería detenerse.

El fuerte martilleo del corazón del chico bajo su mano llamo la atención de Kasumi, la cual se lanzó sorpresivamente sobre él abrazándolo fuertemente y dejando su rostro junto a su cuello, tomando por sorpresa al chico.

— ¿Qué sucede? — preguntó alarmado ante la repentina acción de la chica

— No tengas miedo — le respondió rápidamente.

— ¿Qué? — dijo Bakugo sin entender a lo que se refería, puso sus manos sobre sus hombros separándola y mirándola a los ojos — ¿De qué demonios hablas?

— Tú corazón — Kasumi se separó un poco, para después poner ambas de sus manos sobre su pecho a la altura de su corazón — estaba latiendo muy rápido.

Sabía lo que significaba que tu corazón se acelerara, lo había experimentado incontables veces cuando seguía con los cazadores. No sabía exactamente por qué Bakugo se había asustado pero lo menos que podía hacer era tratar de calmarlo como lo hacia él con ella.

Haze [Bakugo Katsuki]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora