ＳＵＲＶ ♱ ＶＩＮＧ [KM] 국민

1.

Van 5 días desde el comienzo de éste inesperado suceso.

Cinco días en los que he permanecido absolutamente sólo, alejado de mi familia y vagando por las calles de Busan sin saber lo que el futuro me depara.

*5 días antes del apocalipsis*

— ¡JiMin!

— ¿Si, mamá?

— ¡Corazón, tenemos que irnos! Ya es muy tarde, ¡Baja rápido! — Dijo mi madre para después seguir empacando.

Ese día nos estábamos alistando para salir de viaje, iríamos a visitar a mis abuelos maternos.

Siempre hemos sido mi madre y yo solamente, mi "padre" abandonó a mi madre cuándo se enteró de que ella estaba embarazada de mi y nunca se volvió a saber sobre él.

Yo estaba realmente feliz, mi felicidad no cabía dentro de mi corazón, mis abuelos maternos son una de las razones por las que sigo adelante en ésta vida.

— ¿Estás listo mi niño? — Preguntó mi madre observando cómo bajaba las escaleras con una maleta y una gorra que usualmente usaba para salir.

— Sip, rápido vámonos mamá, ya quiero ver a mis abuelos — Dije son una sonrisa de oreja a oreja que hacía desaparecer mis pequeños ojos.

La última sonrisa sincera que tuve antes de que todo se desmoronara.

— Mi cielo, ya estás demasiado grande — Dijo mi madre comenzando a ponerse sentimental mientras acariciaba mis mejillas.

Yo sonreí y abracé suavemente a mi madre mientras acariciaba su espalda con cariño.

Realmente estoy agradecido con ella por todo lo que ha hecho por mi a pesar de las dificultades, gracias a ella soy quién soy hoy en día.

— Bueno ya, basta de sentimientos, ¡En marcha! — Gritó mi madre con una sonrisa para después salir de la casa.

Ella es mi felicidad entera, daría mi vida por mi madre, eso es un hecho.

Salí de la casa y cerré con llave, asegurándome de que todo estuviera en orden antes de subir al auto.

— Ponte el cinturón pequeño chimchim — Dijo mi madre con una sonrisa juguetona.

— Ma, ya estoy grande — Dije haciendo un leve puchero.

Esa era nuestra forma de jugar, nos entendíamos a la perfección.

— Todavía eres ilegal, aún eres mi bebé — Dijo poniendo en marcha el auto mientras reía.

No dije absolutamente nada, sólo la miré, mientras mi madre estuviera feliz, todo estaba bien.

Aún así tuviera que dejar que me dijera ese vergonzoso apodo.

— ¿Por qué hay tanto tráfico? — Se preguntó mi madre a sí misma.

— Ah, ma, ¿Supiste del rumor de un nuevo virus? — Pregunté realmente interesado en el tema.

— Claro, siempre estoy atenta a las noticias.

— ¿Crees que sea real? Es decir...Es algo sospechoso que de repente exista un virus que vuelva caníbales a las personas y mate una parte del cerebro.